"¡Pooh!"
El vino que estaba bebiendo fue escupido y se esparció por el aire. Gotas de líquido color escarlata cayeron sobre la piscina que fue remodelada por primera vez en el verano. Choi Hyung-min, con el vino escurriendo de su barbilla, gritó mientras se limpiaba la cara con el dorso de la mano.
“¡Esto es más que perturbador! ¿Por qué estás teniendo sexo con tu hermano?”
No había necesidad de preocuparse por quién los escucharía. La pensión de Choi Hyungmin, ubicada en Geoje, era una residencia privada de cuatro pisos, con un jardín y una piscina al aire libre. Kyubin se encontraba acostado en una tumbona frente a la alberca, con las gafas de sol rosas que había comprado con Eunbin hace unos días y girando la copa de vino que sostenía en su mano.
"Lo hice porque estaba cuidando a un niño pequeño y me dejé manipular por él, ¿sí?"
"Aquí hay un bastardo peor que yo. Por lo menos yo no tengo sexo con algún familiar de sangre. Así es como se supone que debería ser"
"¿Estás loco?"
"¿No eres un psicópata demente?"
"¿Qué diablos estuviste haciendo?"
Kyu-bin vació su copa de vino, dejando a Choi Hyung-min enloqueciendo junto a él. A través de sus gafas, lo miró a punto de darle un puñetazo en la espalda y le dijo de manera insignificante.
“Está bien porque nunca nos tratamos como hermanos"
“Vaya, de verdad eres...wow”.
“Oh, ahora que sé cómo divertirme con los hombres, preséntame a algunos chicos lindos”
No podía creer que estaba enojado por la actitud irreflexiva de Kyubin, chasqueando la lengua. En lugar de servirse más vino, Choi Hyung-min cogió una lata de cerveza de la nevera. A diferencia de Kyu-bin, que estaba acostado moviendo los dedos de los pies, Choi Hyung-min se sentó a la sombra de una cabaña y se bebió la mitad del contenido de la lata de un solo trago.
“Cuéntame más. ¿Qué otra clase de idioteces hiciste?”
Habían estado siendo mejores amigos desde la escuela secundaria, contándose sus historias familiares y hablando de su vida sexual sin filtros. Se llevaban tan bien que Kyubin lo sentía más como su verdadero hermano que a Eunbin. Su nivel económico familiar era similar y su tendencia a vivir sin preocuparse por el futuro los hacía encajar perfectamente. Kyu-bin, que vivía sin hacer nada, y Hyung-min, asistiendo a la Universidad Nacional de Seúl debido a su inteligencia, estaban en diferentes situaciones, pero ambos coincidían en que la formación académica no era asunto suyo.
Kyu-bin se quitó las gafas de sol y dobló las perneras, con una actitud de que no le importaba nada más de lo que Hyungmin le dijera.
“El problema es que era un niño con un cuerpo increíble. Le daba miedo ponerse erecto todo el tiempo debido a su inagotable energía. Mezclamos nuestros cuerpos por curiosidad, mientras trataba de enseñarle como lidiar con su lujuria. No hay más historia”
Choi Hyung-min se sorprendió mucho por la manera tan tranquila en la que le dió su respuesta y sacudió la cabeza mientras veía a Kyu-bin fanfarronear como si hubiera sido increíble.
“¿Que no hay más historia”? Eso es todo un problema, bastardo”
“Oh, ¿estás sorprendido?” Pero, de todos modos, si se va a Estados Unidos ya no lo seguiré viendo"
"Realmente te convertiste en un demonio"
“Solo le estoy siendo fiel a mis necesidades"
Como se trataba de Choi Hyungmin, Kyubin sabía que escucharía su absurda historia sin hacer nada más que quedarse estupefacto. Si Hyungmin tuviera una forma normal de pensar, seguro lo estaría odiando ahora mismo, pero conociendo su personalidad, Kyubin sabía que podía confiarle esta historia que no podía ser contada a nadie más.
"¿Entonces, experimentaste y decidiste empezar a vivir como es debido?"
Ante las palabras de su amigo, Kyubin se levantó de la tumbona y sonrió diciendo:
“Sí, ahora voy a divertirme correctamente. Llamemos al resto de los chicos para hacer una fiesta”
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Traducción: Snake & Beomi.
Corrección: Beomi.
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Hermanos del deseo
RomantikLos hermanos Jo Kyu-bin y Jo Eun-bin, que nacieron y se criaron en una familia que otros envidiarían, no mantenían una relación cercana, llegando al punto de no dirigirse la palabra a menos que sea necesario durante más de diez años. Pero, un día...