6.3 La manifestación del deseo.

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"Kyubin, ya estamos aquí".

Cuando su madre llegó a casa, dejó su maleta en el porche y gritó.

"Jo Kyu Bin".

Con una voz alegre, Kyubin apareció en las escaleras.

“Bienvenida, mamá y…”

Kyubin, mirando a Eunbin desde lo alto de las escaleras, vestía pantalones de algodón de color marfil y una camisa negra de manga corta ligeramente metida dentro de sus pantalones. Estaba vestido con limpieza y pulcritud, tal como le gustaba a su madre. Con su negro cabello y piel blanca, sonrió levemente. Era una sonrisa que nadie en la familia podía imitar. Las personas poseídas por este encanto, sin importar su género, estaban ansiosas por tomar a Kyu-bin.

“...Mi amado hermano, Eunbin”

Nadie podía saber cuándo los intereses cambiarían. Mañana, podrías volverte loco y voluble, o bien, podrías elegir aguantar unos días más a pesar del cansancio. De lo que Kyubin mismo no podía estar seguro era del corazón humano, en especial del de Eunbin.

Antes de que pierda el interés, se aseguraría de que su hermano menor se hunda en esta relación como si fuese un hábito imposible de dejar. Iba a mantenerlo así para que no pudiera alejarse de él por el resto de su vida.

Eunbin se acercó a Kyubin.

"Hermano, ¿Te la pasaste bien solo?"

Kyubin bajó las escaleras y tomó la mano de Eunbin.

"Sí, fue agradable estar solo".

"¿Qué tanto hiciste?"

"¿A qué te refieres? Estuve haciendo el trabajo de la foto y el vídeo que te envié”.

Eunbin se lamió el labio inferior ante la risa provocativa de Kyubin mirando hacia arriba. Kyubin sonrió ante el comportamiento habitual que tenía cada vez que aumentaba su lujuria.

Kyu-bin pensaba que Eunbin era amable. Su personalidad era buena para ir a los Estados Unidos y jugar un poco, pero no debía acostarte con nadie más, tal como un monje. Mientras tanto, por la mente de Eunbin cruzó el pensamiento de que si su madre no hubiera estado ocupada en la sala desempacando, podría haber derribado a Kyubin en el sofá y desnudarlo.

“Oh, es cierto, Kyubin. ¿Qué te parece la idea de ir a estudiar en Estados Unidos también?"

El rostro de Kyu-bin se volvió en una expresión desconcertada ante las inesperadas palabras.

¿De qué estaba hablando? ¿Cuándo he hecho algo como estudiar? ¿Su cerebro se dio la vuelta después de probar el agua americana?

Eun-bin sujetó a Kyu-bin, que estaba tratando de responder a su madre, rodeándo suavemente la cintura con su brazo. Su madre puso una sonrisa en su rostro sin dudarlo, como si ya estuviera acostumbrada a la relación entre los dos hermanos que expresaba tanta cercanía.

“Dado que hay una buena universidad cerca del lugar que Eunbin está considerando para vivir, creí que te gustaría asistir a ella. Cuando le pregunté al encargado, me dijo que los requisitos de admisión no son estrictos. ¿Quieres probar estudiar en el extranjero? "

Mmm. Parece que alguien inhaló algo y se metió en un sueño extraño.

Kyu-bin, que era bastante inteligente para estás cosas y ya sabía quién le hizo la sugerencia a su madre, entrecerró los ojos y miró a Eun-bin. Eunbin todavía estaba lamiendo su labio inferior. Como si no pudiera soportarlo, le dio un beso en la frente a Kyubin, complementando la historia de su madre.

“Tengo que estar allí durante al menos cinco años. Es un desperdicio tener una casa espaciosa para mí solo. Sobre todo, quería estudiar con el video de hyung, así que pensé que sería bueno pasar tiempo juntos”.

Kyubin respondió con una expresión de molestia.

"No. Odio estudiar."

Cuando estaba apunto de escapar de sus brazos, Eunbin lo sujetó con más fuerza y le sonrió, obteniendo una mirada de disgusto de su hyung.  '¿Por qué estás haciendo esto?' Para su madre, esa sonrisa parecía dulce y amable, y para Kyubin, parecía un disfraz que ocultaba sus oscuras intenciones.

“Es un país libre. Estoy seguro de que también te va a gustar. No tienes que pasar tiempo solo mientras estoy fuera. Es mejor cuando estamos juntos".

Kyu-bin había pensado en reemplazar a Eunbin cuando este se fuera a Estados Unidos, pero siempre tenía la preocupación de si podría encontrar una pareja masculina tan satisfactoria como su hermano menor. Para él, su relación con Eunbin terminaba este mes, así que el pensamiento de encontrar a alguien más fue algo que no pudo evitar. 

Sin embargo, era cierto que después de probar una relación como esta, le resultaba incómodo liberar su lujuria con un hombre que no fuera Eunbin. A Kyubin le gustaba el sexo en el que podía sumergirse sin pensar en nada más, pero lo mejor de todo era la manera en la que Eunbin se aferraba a él como si no quisiera nada más en la vida. ¿Podría un extraño ser capaz de derramar tanto amor como Eunbin? No sería fácil. Era imposible que un tipo como Kyubin, que sabía pensar como una mujer, no sepa que los hombres, especialmente cuando se trata de lujuria, son completamente calculadores.

"Mmm."

Si su madre le hubiera hecho tal propuesta hace unos días, se negaría sin pensarlo. La única razón por la que ahora la estaba considerando era “el sexo con Eunbin”. Incluso mientras Eunbin lo tenía abrazado justo ahora, la temperatura de su cuerpo iba en aumento, mostrando signos de emoción. Por otro lado, Eunbin era demasiado presuntuoso para renunciar tan fácil a él.

"Mamá. Pero si no funciona, estará bien abandonar la escuela y regresar a Corea, ¿Verdad?”.

Quiero decir, ¿cuántas personas iban a estudiar al extranjero y lo hacían correctamente? Era natural darse por vencido a la mitad, a menos que sean jóvenes que tienen una voluntad fuerte y metas claras como Jo Eun-bin. Incluso si llegarás a aguantar uno o dos años, no sería una pérdida porque tuvieras la etiqueta de "Estudió en el extranjero, en los EE. UU."

A menos que tenga que obtener un diploma, sinceramente, ¿no estaría bien intentarlo solo un semestre? Mientras tanto, creo que podría disfrutar de todo lo que quiera en Estados Unidos y regresar aquí sin remordimientos.

"¡Oh!"

La madre, que no podía conocer los pensamientos internos de su primer hijo, se sintió conmovida por la decisión de Kyu-bin. Un alborotador que solo salió y vivió como un idiota y no tenía planes para el futuro, independientemente de la razón, el hecho de que fuera a la universidad en los Estados Unidos, casi la hacia llorar. Por supuesto, las lágrimas brotaron porque pensó que no habría una vida más feliz por el resto de su existencia si los dos hermanos resolvían el problema de la adopción por su cuenta, sin darle preocupaciones a ella.

"¡Claro! ¡Por supuesto! ¡Si no quieres, puedes renunciar!".

Kyubin trató de ocultar su deseo travieso de decirle a su conmovida madre: "Entonces tendré sexo con Eunbin". Giró su mano hacia atrás y agarró el trasero de Eunbin. Eunbin se estremeció. Estaba tan feliz de verlo tan emocionado y estaba tan caliente que se echó a reír más de lo normal. Eunbin también frotó el trasero de Kyubin. La madre, que no sabía que los dos jugaban con sus manos, dijo emocionada.

"Nunca imaginé que nuestro Kyubin crecería así.... Eunbin tiene mucha influencia positiva en tí. Estoy tan feliz. No sabía que ustedes dos tendrían una relación tan buena después de lo que pasó con Eunbin... .”

Suspiro.

A diferencia de Kyu-bin, que suspiró absurdamente ante la reacción de su madre, Eun-bin besó su mejilla en el momento oportuno. Su madre ya no dudaba de la expresión de afecto de Eunbin. Ahora había una creencia de que no había nada de extraño en las acciones y pensamientos de Eunbin con su hermano.

“Tendré que hacer lo mejor que pueda para que Hyung no se dé por vencido en el camino”.

Sin el conocimiento de su madre, apretó su ingle contra Kyubin. Los ojos de Kyu-bin cambiaron debido a la masa que se sentía sobre la ropa. Mientras tanto, el cuerpo que se había vuelto insatisfecho respondió de inmediato.

"Bueno, veré lo que estás haciendo y tomaré una decisión".

"Pensaré en cómo apaciguar el capricho de mi hermano"

“Es un capricho… Uhm.”

Kyubin agarró la mano de Eunbin como si no pudiera soportarlo más.

“Mamá, hablaré más sobre Estados Unidos con Eunbin. Iremos arriba, no tienes que venir”

La madre sonrió brillantemente.

"Les llevaré una bebida".

“No es necesario, si tenemos hambre, bajaremos y comeremos”.

"Está bien, ustedes dos tienen que hablar profundamente".

Kyubin miró a su madre mientras subía las escaleras con Eunbin. Al ver a la feliz y sonriente mujer, se sintió extraño. Nunca había imaginado tanta armonía en la familia, y no sabía por qué de repente se había vuelto así.

Kyubin entró en la habitación de Eunbin, lo acostó en la cama y dijo.

"Mierda... Estoy tan avergonzado de mí mismo, no puedo creerlo…"

Una madre feliz y un hermano amistoso. Kyubin frunció el ceño como si hubiera una terrible reacción de rechazo ante tales pensamientos. Sin embargo, no había forma de que Eunbin no pudiera reconocer esa expresión de vergüenza, pero parecía que no podía evitarlo.

“De todos modos, Hyung que parece ser siempre honesto, no está siendo sincero sobre esto”.

"No te metas conmigo".

“Ha pasado mucho tiempo desde que mi madre sonrió brillantemente mientras miraba a mi hermano, ¿no es así? ¿Te sientes bien?"

"Te dije que no lo hicieras".

Kyubin, que se subió al Eunbin derribado, se quitó los pantalones. El agujero por el que el dildo había estado entrando durante un tiempo se aflojó suavemente. Kyubin jadeó para respirar mientras frotaba ese agujero en la ingle de Eunbin.

“Acepté ir a los Estados Unidos por esto”

"Creo que esto es lo suficientemente bueno como para ir hasta Estados Unidos, hyung".

"Oh. Me gusta más el tuyo que el de plástico. Así que… ”

Kyubin se inclinó. Su cabello suelto tocó la cara de Eunbin. Sin siquiera sentir la sensación de cosquilleo, Kyubin besó la boca de Eunbin y sonrió. Sonrió tan inocente como un niño que obtiene lo que quiere.

“Date prisa y di que te gusto. Agítalo tanto como quieras”.

Eunbin no podía respirar lo suficiente y su corazón latía con fuerza. Era una falta que el hermano mayor puntiagudo y afilado se volviera suave y blando solo en momentos como este. En cierto modo, era un hermano mayor realmente malo. Era peligroso y dañino, tanto que no quería que otras personas lo noten.

Suspiro. "Hyung, haré que te gradúes en Estados Unidos”.

Eunbin, que se dio la vuelta, rápidamente se quitó los pantalones y se sacó la polla. Susurró mientras metía el gran pene dentro del cuerpo de Kyubin, que abrió de una sola vez.

“No te preocupes, confía en mí. Haré lo que quieras".

Kyubin aceptó lo que había estado esperando durante una semana.

"¡Suspiro, ah, ah, ah, esto es todo, ah, ah!"

"Oye, se ha vuelto tan estrecho en este momento, ah ah"

“Ah, demasiado grande para mí, ah, ah…!

"No sirvió de nada ser apuñalado con un pene falso, uh, uhm".

“¡Ah, ah, ah, ahí, ahí, más, ah, ah!”

Tanto Kyubin como Eunbin no pudieron reprimir los gemidos que estallaron, sin siquiera pensar en taparse la boca. Después de mucho tiempo, se entregaron al cuerpo del otro, estaban tan absortos que no les importaba nada, así que ninguno de los dos escuchó el crujido y el chirrido en el segundo piso. Cuando bajaron a la cocina del primer piso después de tener sexo durante una hora, pensaron que la razón de la palidez de su madre era simplemente por lo agotador del viaje.

Una relación que solo era desconocida para su padre continuó hasta que se fueron a Estados Unidos. Su madre dijo con orgullo a las personas que la rodeaban: "Irán a Estados Unidos para estudiar". Eunbin, que estaba observando a su madre de cerca, incluso le dio un beso profundo a Kyubin frente a ella, pero esta vez, su madre giró la cabeza y lo dejó pasar.

“¡Oye, ah, Eunbin-ah, ah, ah!”

Eunbin dudaba que su madre llegara tarde a casa el día que su padre se fue de viaje de negocios. Deliberadamente tuvo sexo con Kyubin en el dormitorio. Kyubin, que estaba acostado boca abajo y levantando las caderas, no pareció darse cuenta, pero Eunbin notó la mirada descarada. Se giró para mirar a la mujer que estaba conteniendo la respiración detrás de la puerta. Al verla congelada, Eunbin sonrió mientras clavaba su propia polla que estaba al rojo vivo en el húmedo agujero de su primer hijo, al que había dejado de lado por mucho tiempo.

"¡Ah!"

Él mostró claramente cómo su primer hijo, con quién ya no podía interferir, lloraba en los brazos de su segundo hijo, quien fue criado y utilizado para la cómoda vida de la mujer.

Ella invitó a muchos amigos a casa y se jactó de EunBin y KyuBin.

"Mis hijos se llevan muy bien".

Eso fue todo. Incluso si los gemidos de los dos resonaban en la casa a la mujer no le importaba, pues tenía algo de lo que presumir con sus vecinos. 

Eso era suficiente para ella.






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Traducción: Snake & Beomi.
Corrección: Beomi.

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