31 días Multishipper MCU

Vivir juntos #Starker

★゜・。。・゜゜・。。・゜★

—Ven a vivir conmigo

—mmm

Peter no puso atención a lo que le dijo, sus sentidos aún se estaban recuperando del viaje a las estrellas. Respiraba pacíficamente con los ojos cerrados.

—Vivamos juntos

—¿Lo dices enserio? no bromees— despertó dándose cuenta de lo que estaba hablando.

—Yo no bromeo Peter...quiero que vivamos juntos, aquí si quieres o en otro lado, tu y yo— con su dedo índice dibuja círculos en la espalda desnuda del chico que se abraza a su pecho entre las sábanas revueltas.

—Eso es -es wow , nose-nose que decir— Peter se levantó y lo observó, sus ojos ámbar y esa sonrisa tan linda que mostraba sus dientes y ocultaba su miedo al rechazo, miedo de haber sido impulsivo y quizá haber echado a perder su deseo al decirlo en voz.

El joven castaño entendió a la perfección las palabras en sus ojos y levantó una mano para acariciar su mejilla asegurándole que fue el momento justo para dejar hablar a su corazón.

Despacio se movió en la cama y pasó una pierna sobre él hasta sentarse en su estómago. Volvió a mirarlo y despacio se inclinó para besarlo suavemente, apenas si sus labios se tocaban.

—Di que sí— dijo suplicante mientras acariciaba su muslos suavemente— quiero despertar todos los días a tu lado

Peter risueño se inclinó de nuevo hasta besarlo.

—Eso ya lo hacemos— susurro a mitad del beso

—Pero ahora incluye los días festivos— ambos rieron— ...llevamos mucho tiempo juntos, se que podemos hacerlo. Ahora Tony inició otro beso sujetándolo de la nuca rodeando su delgado cuello.

— sí quiero— el beso fue más profundo esta vez, robándose el aire mutuamente — ...pero qué pasa si funciona— sus pupilas cafés se movían nerviosas y su ceño se frunció hacia arriba, mordió su labio inferior y sonrió finalmente intentando ocultar su nervios de la misma forma

—Tranquilo, te juro que funcionará, somos perfectos juntos

—Lo sé

—Créeme, será tan increíble que no recordaremos cómo era antes de esto.

La pareja tomó la decisión en ese perfecto momento, no querían esperar más tiempo al haber tanta ilusión de estar juntos y una semana después Peter hizo su mudanza para llevar las cosas al apartamento, ya no de Tony, sino de ambos.

Al principio lo más difícil fue acoplar sus rutinas; la hora de llegada y de salida, los tiempos de la comida, lugares para hacer las compras, hora de dormir y de despertar, ordenar, repartirse las tareas y los espacios. Ya que ordenaron esa parte, inicio lo divertido. Hicieron viajes, volvieron a tener citas, organizaron fiestas en la casa, compraron muebles y agregaron decoración que mostrara que ahora eran dos, no uno. Incluso adoptaron un perrito, era un salchicha adulto demasiado juguetón y ruidoso que para la primera semana Tony ya quería arrojarlo por el balcón.

—Cariño llegaste temprano— lo escuchó entrar

—Hola amor—él fue a la cocina y Tony seguía viendo algo en la tableta— la última clase no la tuvimos, hola pequeñín — su perrito llegó saltando— ¿ya comiste?...—Esperó que respondiera, su pareja por supuesto, no el perro— ¿Tony?

—Si, ya comió. Hoy que quieres ordenar por cierto, o podemos salir si prefieres— Se giro sobre el sillón para verlo

—Mmm no, voy a cocinar, tengo tiempo y hace mucho que quería hacerlo