(2) Cap 13, esto no acabará aquí.

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La mujer indicó a los agentes que vigilaban a los adolescentes que los dos hermanos se levantaran. Estos dos lo hicieron, dirigiéndose a ella.

—Hola Martinna, Newt. —Estos dos no podían esta más confundidos —Cuánto tiempo sin vernos. —Primero, ¿Por qué quería hablar con ellos dos en específico? Segundo ¿Cómo que "cuánto tiempo sin vernos"? Martinna supuso que se refería a cuando vivían en las sedes de cruel.

Teresa salió de entre la multitud de adolescentes, cabizbaja, repentinamente tímida y con miedo. En cuánto levantó la mirada, se encontró con los ojos de Martinna. Solo con este gesto la morena ya podía confirmar que había sido ella. Se notaba por la forma en la que caminaba, por el miedo que tenía de mirar a los demás, por lo nerviosa que estaba. Ava la miró e hizo un gesto indicándole que se acercara a ella. Teresa lo hizo, sabiendo que ese sería el fin con sus amigos, ya no la perdonarían.

—¡Pero qué coño! ¿Teresa? —exclamo Fritanga con el ceño fruncido.

—¿Pero que pasa aquí? —inquirió Newt. Martinna suspiró mirando a la chica que se encontraba al lado de Ava.

—Es parte de Cruel. —murmuró la de pecas. Thomas abrió los ojos, sorprendido.

—¿Desde cuándo? —preguntó Minho.

—Teresa siempre ha tenido un aprecio más desarrollado del bien común —comentó Janson llegando a la situación. Martinna cerró sus puños, conteniendo su enfado por la chica y Janson, queriendo empezar a gritar. —Le devolvimos los recuerdos, y solo fue cuestión de tiempo.

—Ella avisó a los helicópteros de nuestra localización para que nos capturen. ¿O no, Teresa? —dijo Martinna mirándola con enfado, sin poder creerse que en algún momento la había considerado su amiga. Teresa intentó hablar, pero no sabía muy bien que decir.

—Lo-lo siento. No tenía alternativa, esta es la única salida. Tenemos que encontrar una cura —balbuceó, sintiendo como las lágrimas caían por su rostro.

—Tiene razón —comenzó a decir Ava. —esto no es más que un medio para conseguir un fin. Eso antes lo entendías Thomas —se dirigió ahora al chico, que se encontraba al lado de la morena. El chico no quiso si quiera recordar esa antigua parte de él. —Y tú Martinna...fuiste todo lo contrario. Nunca quisiste ayudarme en nada, solo estabas pendiente de tu hermanito Newt, sin si quiera implicarte en lo que pasaba en el resto del mundo. Suerte que no le contagiaste ese pensamiento a tu novio, Thomas. —desveló con voz amarga, con rencor hacia la morena. Eso significaba que sí habían estado juntos antes del laberinto—Penséis lo que penséis, no soy un monstruo. Soy doctora, e hice el juramento de encontrar una cura, a cualquier precio. —Martinna sentía como todo en ella quería salir. Su boca le pedía que soltara todo lo que pensaba, pero ella solo pensaba en reprimirlo, en guardarlo.

Thomas al notar esto agarró su mano con suavidad, entrelazó sus dedos y consiguió que la tensión en ella disminuyera notablemente. Martinna le dio un leve apretón, mostrando agradecimiento por su gesto.

—Necesito más tiempo —dijo Ava, acabando con su discurso.

—Y más sangre —la mujer que ayudó a que Brenda se curara salió de detrás de los guardas, consiguiendo que la soltaran. Dispuesta a encararse con la mujer de blanco.

—Hola Mary —dijo está ablandando su expresión al verla. —Esperaba que volviésemos a encontrarnos, siento que haya sido en estas circunstancias.

—Yo también siento demasiadas cosas, pero esto no —dijo Mary realmente convencida de sus palabras. —Yo al menos tengo la conciencia tranquila.

—Yo también —dijo con voz calmada. Y de pronto, sin que nadie lo intuyera o se lo esperara, un disparo retumbó el lugar desconcertando a todos. ¿Quién había sido? ¿A quién habían disparado?

The Maze Runner: Escape [#2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora