"Himika significa misterios peligrosos. Asi se llama mi pueblo.
Si lo buscas en el mapa no lo encontrarás, pero si viajas por la carretera sin rumbo aparecerá, pero jamas podras volver a salir.
Un pueblo sin rumbo, que tiene muchos misterios, muchas...
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YUKARI
—¿Pero que mierda es esto, Yukari? - exclamó una señora de mediana edad
—Perdona, Madre... —susurré con la cabeza gacha,mientras intentaba contener las lágrimas
— ¡No te disculpes! ¿Acaso crees que eso arreglara algo? —finalmente dos hileras de lágrimas empezaron a resbalar por mis mejillas— ¡Y ahora lloras! Eres una inútil, todo lo haces mal.
Mi madre alzó su mano, sabía lo que se aproximaba pero si retrocedía o intentaba repelar me iría peor, por lo que solo me quedé parada, esperando el pellizco y no estaba mal... lo recibí y esa vez fue en el lóbulo de la oreja izquierda.
—¿Crees que tus malditas disculpas y lloriqueos arreglarán algo? ¡Ya me tienes harta! me voy. Y será mejor que busques un lugar donde pasar la noche.
Ahí fue cuando levante la cara, mi madre ya se encontraba camino a su hogar, empecé a correr pero la calle parecía infinita, estire la mano quería poder alcanzarla pero al no estar observando donde pisaba solo conseguí caerme mientras observaba cada vez más lejos la silueta de aquella mujer a la que llamaba "madre".
Desperté en mi cuarto con la mejillas aún mojadas gracias a las lágrimas. Todo había sido un sueño...
-Mierda... eso fue hace dos años... ¿por qué sigo recordándolo?
Me levante de la cama, no creía que podría volver a conciliar el sueño, al menos no está noche. Baje las escaleras y me senté en el sofá, mientras recargaba mi cabeza en las manos vi algo por el rabillo del ojo. Una sombra pasó corriendo era pequeña, pero más grande que un ratón, pareció esconderse detrás de un mueble, me levanté a observar que era pero justo antes de llegar a donde creí haber visto que se escondía, escuché crujir el piso detrás mio, me volví rápidamente, no pude observar nada cerca del librero pero cuando estaba por acercarme un libro cayó. <<pero que...>> no pude terminar mi pensamiento, las luces se encendieron, aquello ocasionó que me deslumbrara momentáneamente.
-¿Yukari? ¿Eres tú?...no, mejor dicho ¿Qué haces despierta? - oí la voz de Megan desde las escaleras.
-¿Ah?.. ¡Oh!... ehm bueno... - pase mi mano por mi nuca y la deje ahí, tenía ese hábito. - es que no podía dormir... por otro lado ¿tú que haces aquí?
-La verdad es que me dio algo de sed, así que pensé en bajar a la cocina por algo de beber... ¡oh! Espero no te moleste...
-No no, para nada
Megan asintió con un movimiento de cabeza y se dirigió a la cocina, mientras tanto yo fui a recoger aquel libro y justo cuando lo tuve en mis manos volví a oír la voz de Megan.
-¿Tienes mascotas? Lo digo porque cuando llegamos vi unas croquetas pero no he podido ver a ningún animal.
Me tarde un rato en responder, al inicio pensaba decirle que si, tenía a Newt pero ¿siquiera se podía considerar mi mascota? Lo alimentaba, solía bañarlo e incluso lo llevaba al veterinario, cierto, pero no vivía en esta casa e incluso llevaba desaparecido un tiempo.
