Psicomagia

41. ¿Entonces son novios?

Habían pasado dos días desde que regresaron de Hogwarts, se estaban acostumbrando al entorno familiar y a vivir juntos, Harry se encontraba encantado con la mansión y entre más confianza tomaba, más exploraba, a Hope le alegraba ver que fuera tan curioso, era algo realmente bueno.

—Hope —Severus la llama y la mujer lo mira—. ¿Invitaste a todos a cenar?

—¿Qué? —dice confundida.

—Recibí una carta de Lucius, dice que vendrán para cenar, al igual que tú hermano —le extiende las cartas.

—Extraño, yo no les he dicho nada —frunce el ceño y niega—. No importa, supongo que arreglaré todo para la cena —deja su libro y se levanta.

—Necesitas ayuda.

—Avisale a Harry —dice mientras sale de la sala de estar.

Severus sube a la habitación del chico pero la encuentra vacía, frunce levemente el ceño.

—Kurly —llamo y un elfo apareció haciendo una reverencia a sus pies.

—¿En qué puedo servirle amo Severus?

—¿Sabes dónde está Harry? —lo mira.

—El amito Harry está en el jardín principal, volando en su escoba.

—Gracias Kurly, ve y mira en que necesita ayuda Hope —el elfo hace una reverencia más antes de desaparecer.

Severus baja y sale de la casa, mira el jardín y ve a Harry haciendo maniobras sobre su escoba mientras uno de los elfos lo cuida nerviosamente, sonríe de lado mientras lo escucha reír.

—¡Harry! —lo llama y Harry gira en su dirección, sonríe y desciende en su escoba—. Necesito que vayas a arreglarte, tendremos compañía para cenar.

—¿Compañía? —ladea la cabeza—. A Sirius no le molestará que este volando, quizás se una —sonríe emocionado.

—También vienen los Malfoy, ve a tomar un baño y a arreglarte.

—Pero estoy volando —se queja—. Cinco minutos más.

—No Harry, ve.

—Solo cinco minutos maaaassss —vuela a su alrededor con la escoba.

—Harry —dice en advertencia.

—Solo dos vueltas más. Vamos papá, solo un ratito más —lo mira anhelante pero Severus lo miraba shockeado, está seguro que su corazón se saltó dos latidos—. ¿Papá? —dice suavemente preocupado y Severus tiene que usar todas sus fuerzas para no caer y carraspea.

—Solo dos vueltas más —dice con seriedad recobrando la compostura—. Y entras a tomar un baño.

—Esta bien —sonríe ampliamente y se aleja volando, mientras tanto, Severus entra a la casa y camina a la cocina, se encuentra con Hope quien ordenaba algunas cosas.

—¿Llamaste a Harry? —lo mira y frunce levemente el ceño al ver su semblante—. ¿Sev?

—Me dijo papá —dice afectado—. James debe estar revolcándose en su tumba.

Y Hope lo entiende, porque se sintió bien cuando escuchó la palabra de la boca de Harry, pero luego se sintió miserable, porque ocupaba el lugar que una vez fue de su mejor amiga, así que se acerca y lo abraza, Severus se aferra a ella, esto era más complicado de lo que alguna vez pensaron, es más complicado que firmar un documento diciendo que serían sus tutores, era más complicado que solo preocuparse.

—Creo... Que a ellos les gustaría estar aquí —dice Hope suavemente, nunca hablaban de eso—. Pero, siento que ellos también estarían felices de ver que Harry puede tener una familia, quizás la familia que siempre se mereció.