Obsessed |Larry|

16. Arriesgarse

Harry se sentó en el palido sofa, dejandose caer hacia atrás subio un pierna, apoyando en pie en el borde, e inclinó la cabeza, escuchando el click de la camara al capturar la imagen. Moviendo el cabello lejos de su rostro, se concentro en el continuo sonido de la maquina y la voz del fotografo, el cual estaba soltando ordenes a diestra y siniestra en espera que Harry las cumpliera sin chistar. Él lo hacia, despues de todo era todo lo que habia estado haciendo desde hacia tres años.

Harry era esto, un muñeco bonito que a la gente le gustaba manejar y él lo habia permitido.

Por un momento, se pregunto que habia sido del chico que queria ser maestro de jardin. Dios, estaba tan lejos de su sueño. Le hubiese gustado poder terminar su maestria y enseñar a niños pequeños las cosas basicas, era lo que queria. Escuchar la risa de un niño siempre le levantaba el animo, podia parecer estupido pero siempre le habia gustado poder ser capaz de darle una enseñanza a un pequeño y pensar que podria implementarla luego, recordandolo.

El sonido de la puerta abriendose logró que levantara la mirada, esperando ver a Zayn volver con sus cafes. Harry todavia estaba bastante enojado con el chico pero por petición de Liam, habia decidido intentar perdonarlo. La forma del moreno de ganar su perdon era pegarse a él y correr a cumplir ante la primer orden del rizado. Harry solo habia dicho que tenia ganas de un café y antes de que se diera cuenta, Zayn estaba corriendo en dirección a la puerta gritando un "Yo voy" sobre el hombro. Le daba pena el niño, realmente solo queria ayudar pero debia aprender una lección y Harry estaba dispuesto a enseñarle que no debia meterse donde no era llamado.

Para su sorpresa no fue Zayn quien cruzó el umbral, sino Emma. La pelirroja llevaba su cabello atado en una alta coleta, una gran sonrisa y a Ginger en sus brazos. Harry le hizo un gesto al fotografo para tomarse un descanso cuando se encontró los ojos de Emma y esta le hizo un gesto para que se acercara.

—¡Hola, princesita hermosa! —aplaudio suavemente al acercarse a ellos. Los ojos de Ginger se dirigieron a él, abriendose de par en par mientras una sonrisa se extendia por sus labios, sus brazos y pies moviendose sin coordinación. Harry extendio los brazos y miró a Emma con un pucherito—. ¿Me dejas cargarla?

La chica rodo los ojos y se la tendio con una sonrisa—. Eres con la única persona que no es de la familia con la que se queda y no llora a mares, es impresionante.

—Nosotros nos entendemos —subio a Ginger hasta su rostro y beso sus mejillas regordetas sonoramente—. ¿Verdad, pequeñita? Nosotros somos amigos ahora y nos entendemos.

Ginger lo miró detenidamente un momento antes de soltar un pequeño chillido que hizo vibrar los oidos de ambos, sonriendo luego. Emma soltó un quejido—. Diablos, heredo la voz chillona de Louis, lo que me faltaba.

—No es tan malo.

—¿Alguna vez lo escuchaste enojado? —hizo una mueca—. Es como escuchar uñas sobre una pizarra, esa era la única razón por la que ganaba en todas nuestras peleas, yo me marchaba porque temia quedarme sorda con sus gritos.

Harry rio suavemente porque si, habia escuchado a Louis enojado. Y si, sonaba como un maldito zumbido luego de unos momentos.

Acunando a Ginger en sus brazos, miró a Emma—. ¿Que las trae por aquí? No es que me queje pero no tenia idea de que teniamos una sesion juntos.

—Eso es porque no la tenemos —Emma se veia jodidamente incomoda mientras miraba la punta de sus zapatos de tacón, pasando su peso de un pie a otro—. A decir verdad, vine a pedirte un favor.

—Claro, si puedo ayudarte estaré encantado.

Ella le dedico una sonrisa pequeña—. Bueno, se suponia que mi madre pasaria por Ginger ahora pero ella no ha llegado y no tengo a nadie más que pueda quedarse con ella. Intenté con una niñera hace unos días pero ella solo llora a mares y la chica casi se vuelve loca —suspiró, pasando una mano por su pelo para mirar a Harry—. La única razón por la que te voy a pedir esto es porque sé que Louis confia en ti con su vida y si no estas disponible o simplemente no quieres, prometo no enojarme, solo debes decirmelo y...