Secreto [Lᥙᥴᥲs Mᥲrtιᥒᥱz Qᥙᥲrtᥲ]

21

—Gracias, nos vemos después— dije bajándome rápido del auto.

—Nos vemos, Lena— contesto Ariel.

Corrí hasta la entrada del estudio intentando no caerme aún que es al pedo porque igual me moje, al pedo todo mi esfuerzo.

—Hola hola— dije saludando con la mano a los que me cruce y fui volando hasta donde están los vestuarios, bah, los camarines.

—Hola nena— dijo Rubén apareciendo en frente mío con unos papeles.

—Holis— conteste toda agitada.

—Estas empapada, anda a cambiarte.

—Si ya..en 5 estoy— me metí al camarín nuestro, un intento de camarín en realidad.

Me cambié lo más rápido que pude, porque obvio acá tenemos ropa por estos casos y además que ayer como también llovía tuve que dejar ropa extra, y el bolso con las cámaras y demás cosas.

Volví hacerme la colita en el pelo, agarre el bolso y me fui al salón.

—Ahora si, buen día— dije haciendo saludo en general.

—Buenas..

—Buen día lenita— dijo Rama sonríendo.

—Toma— Rubén me pasó un vaso con café.

—Uh sos el mejor— lo mire y Rama carraspeó— Bueno eu, saben que los quiero a los dos por igual.

—Si arreglala ahora— reímos.

Me senté mientras tomaba mi café y veía como iban acomodando las luces y todo el "escenario" para las fotitos.

—Che, muy lindo todo pero la modelo no aparece— dije mirando mi reloj en mi muñeca y suspire.

Hace 20 minutos tendría que haber llegado.

—No sé que pasó pero dale 5 que entra Bea a los gritos— respondió Rama.

—Uff..

De todos modos me puse a cambiar los lentes de la cámara y la puse en el trípode.

—A ver..a ver..— se escuchó y entro nuestra jefa con su celular en la mano y los anteojos en la otra— Necesito que me presten atención..

Caminamos todos frente a ella cuál nenes que están a punto de comerse una cagada a pedo.

—No no.. Malena, vení conmigo— dijo dándose media vuelta y volver a salir por la misma puerta.

Mire a Rama y Rubén, y los dos me hicieron una mueca. Me tiemblan las patitas, ya me voy considerando echada del laburo.

¿Que cagada me mande?

Salí atrás de ella y juro que me transpiran las manos y me tiemblan las piernas.

Solo me imagino que me va a cagar a pedos y me va a echar, seguro.

Dejo la puerta abierta de su oficina y cuando yo entre estaba sentada mirando su computadora.

—Cerra y toma asiento— hablo sin mirarme.

Le hice caso y me senté frente a ella.

—Eee..que..— carraspeé— ¿Pasa algo?

—Dame un minuto..

Me quedé callada y mire mis uñas, ni siquiera tengo el celular como para mandar un mensaje de auxilio, necesito que hable lpm.

—Bueno, Malena..— se sacó los lentes y me miro— Estuve pensándolo mucho, lo analice con mis colegas, y mis especialistas..