Hello again... Jungkook

『5』

Dos semanas pasaron y Taehyung volvía a la universidad, Jungkook lo pasó dejando en su moto. Tae se bajó y se quitó el casco al igual que Jungkook, este mismo era muy celoso por lo que besó al menor con algo de posesión y dejó un par de marcas en el cuello del mismo para que todos supieran que era suyo y nadie lo tocara. Por que si, Jungkook en ese sentido se podría decir que era un poco tóxico.

Tae no se quejó porque le gustaba que su novio fuera un "poco" celoso con él, le dejó un último beso en la mejilla al mayor, este mismo sonrió, se puso su casco, se despidió y se fue a su trabajo.

Tal vez hicieron una pequeña escena frente a toda la universidad pero a Taehyung le daba igual.

Al entrar a la Uni se encontró con Yoongi

—¿Dando espectáculos a las siete de la mañana? Hay no —Miro al cielo—. Dios líbrame de cualquier maldición que me haya llegado luego de ver eso, todavía no quiero una garrapata a mi lado—. Hablo con sarcasmo y diversión, sacándole risas a ambos.

—El día que te enamores, te molestare hasta que seas un abuelo... A no, eso ya lo eres—. El menor volvió a reír.

— ¡Ya! Mocoso respetame, soy mayor que tu

—Lo se abuelo—. Comenzó a caminar dejando al pálido hablando solo atrás... Ahora comenzó a correr.

—¡Vuelve aquí sabandija de dos tapas!

—¡Perdóneme la vida hyung!

Con eso Yoongi dejó de perseguirlo.

—Awww, te gusta que te digan Hyung—. Lo volvió a molestar.

—Te acabas de salvar de un golpe ¿Y ya estás buscando otro?—. Lo amenazó.

—Ya ok, me calmo—. Rio bajito.

Ambos caminaban a sus aulas que estaban en la misma dirección, Yoongi miró de reojo el cuello de Tae y por alguna razón no le gustaba ver esas marcas rojas en su cuello. Simplemente sentía una leve incomodidad al ver su cuello manchado con esas feas marcas, pero no dijo nada.

Estaban por tomar caminos distintos cuando Yoongi tomó del brazo al menor.

—Espera, tengo para ti—. Se quitó la mochila y sonrió poquito al ver la cara de curiosidad y emoción en el menor.

Tae estaba emocionado y curioso, no sabía lo que el mayor le daría y no sabia por que se lo daba.

Luego Yoongi sacó de su mochila una caja mediana con papel verde, que por cierto era su color favorito.

—Ábrelo cuando estés en clases—. dijo, le guiño un ojo y se fue a su aula que estaba en la dirección contraria.

El menor sonrió y corrió rápido a su aula para abrir dicho regalo, siempre teniendo cuidado de no dañar el contenido de la caja.

Al estar ya sentado en algún asiento de su aula, se dispuso a abrir el regalo con cuidado. Sus ojos se abrieron en grande al sacar de la caja la cámara que no se pudo comprar cuando fue a la tienda en donde trabajaba el mayor.

Dentro de la caja todavía había una carta, la tomó y leyó.

"Pequeño león, feliz cumpleaños atrasado. Se que pasaste tu cumpleaños con tu familia y no habíamos podido vernos, por lo que este es mi regalo. Si lo rechazas te jalan las patas en la noche..."

El menor rió por eso

"Ya en serio, espero que lo aceptes pequeño león"

Tae sonrió en grande, claramente no iba a rechazar dicho regalo, que aparte por que lo necesitara. Era una muestra de cariño de Yoongi, quien dicho hombre raramente da regalos y por eso la cuidaría mucho.