『8』

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Dicho y hecho, Namjoon llegó al departamento de su amigo en quince minutos.

—¿Qué sucede?—. Pregunto al estar ya dentro del apartamento.

—Sígueme—. Ordeno el azabache y camino siendo seguido por el moreno hasta su habitación donde estaba Taehyung inconsciente.

Nam al ver a la pareja de su amigo acostado bajo una algo grande mancha de sangre se asustó y fue a revisarlo, dándose cuenta que la sangre provenía de su parte baja. Miro al azabache buscando una explicación para tal brutalidad pero Jungkook solo desviaba la mirada.

—¿Me explicas o tengo que ser de adivino?—. Pregunto con molestia.

—Estaba enojado—. Dijo simple

Nam lo miró con asombro sin dejar de mirarlo con enojo también.

—Estás jodiendo ¿Cierto? Por que esa explicación es estúpida, Jungkook.

El azabache lo miro, estaba serio—. Estaba enojado—. Repitió y de un momento a otro estaba en el suelo con un dolor en la quijada por el golpe que le dio el moreno.

—¡Eres un idiota! ¡¿Como mierda dices que solo porque estabas enojado lo dañaste de esta forma?! ¡No eres un idiota, eres un imbécil y una basura al tratar así a tu pareja solo por que dices estar enojado!—. Estaba enojado, ¿Qué imbécil tenía de amigo?

Jungkook no le respondió, simplemente dejó que el moreno le dijera lo que quiera y que ayudará a su pareja.

Nam ayudó al castaño, primero que nada en una intravenosa le puso algo de anestesia para que no le doliera mucho aun estando inconsciente. luego lo limpio con cuidado y otras cosas más para ayudarlo a recuperarse.

Mientras Jungkook estaba en la cocina dejando la botella de vino en la basura. Estaba por abrir la puerta del refrigerador cuando miro el postick sostenido con un imán en la puerta de este.

Leyó la nota y se dio una fuerte bofetada al darse cuenta de lo que hizo por unos tontos celos. Había hecho daño horriblemente al menor y este le había dejado una nota de dónde y con quién iría esa noche.

En eso el moreno iba saliendo del cuarto donde estaba el menor con las mantas en donde estaba la mancha de sangre.

Le dio las mantas y lo miro con mucho enojo—. Te ayudé esta vez, pero no lo volveré hacer. No con algo así de horrible como lo que hiciste—. Le dio unas pastillas que el menor tenía que tomar para quitar el dolor y recuperarse.

Y con eso se fue. Claramente Jungkook era una mierda por lo que le hizo, pero Nam también porque cuando bien podía decir esto a la policía no lo hizo, simplemente guardo silencio esperando que su amigo no volviera hacer algo como eso.


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Sábado, Taehyung despertó con dolor en sus caderas y parte trasera. La cama estaba vacía y un golpe de recuerdos de la noche anterior le llegó, volvió a llorar sin moverse mucho por el dolor.

Jungkook entró en la habitación con el desayuno del menor en manos, este mismo al verlo se asustó.

El mayor se sentó a su lado en la cama, dejando el desayuno en la mesita de noche.

—Lo siento, no mire la nota...—. La verdad no sabia que decirle luego de lo de anoche.

Tae volvió a llorar y sin nada de fuerza le daba golpes con empujones en su hombro, Jungkook lo abrazó con cuidado.

Hello again... JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora