Cielo mío.

0.5

Iván.

Andábamos todos en friega por la fiesta de bienvenida que le haríamos a Eva.

–Ovidio ya deja de comer chingao– dijo Vicente mientras lo veía como se chingaba toda la comida.

–Dejen me voy, a dónde si me quieran, vámonos Sera– dijo y sin más salieron de ahí.

Vicente y yo nos quedamos solos, Alfredo y Mayito quien recién habían llegado junto con el chino fueron a mirar sobre los grupos.

– Así que Eva es tu hermana–dijo Vicente.

–Asi es–

–Es raro por qué puedo jurar que se parece más a mí que alguno de ustedes– dijo mientras me veía–Ademas que está cagada a Serafín.

–Lo sabes– lo mire y asintió. –Nosotros la cuidamos y la protegimos de el toda la vida.– no necesitaba mencionar nombres, el sabía de quien hablaba.

–No sabes cuánto se los agradezco– dijo viéndome– Su madre era mi mejor amiga– dijo viendo ahora a Eva quien se reía con sus nuevos amigos, Nini, el trece, trébol y el 27.

–Ya no hay que ponernos de culos– dije riendo haciendo que el también lo hiciera.

Eva.

–Oiga, cree que le pueda mandar un saludo a mi hermana– dijo el 27– le gusta mucho todo eso de los concursos de belleza y todo el pedo.–

Grabe el vídeo, diciéndole a la pequeña Mónica, que siempre luchará por lo que ella quería, y algunas cosas más.

–¡Eva!– me habló mi ama.

–Me les voy jóvenes– dije dándoles un beso en la mejilla a cada uno, haciendo que se sonrojaran y que la mirada de Vicente y Iván se fijarán en mí.

–¡Te estoy viendo pinche Eva Danira!– grito Iván haciendo que solo le guiñara.–Hija de la verga–.

[•••••]

Era la hora de la fiesta, mis hermanos ya estaban afuera, Marca Registrada, y Edición Especial estaban tocando.

Así que se vería súper normal que Miss México fuera la hermana de uno de los Narcos más buscados.

Me mire al espejo, estaba en ropa interior, viendo mi cuerpo, quien una vez causó tantas inseguridades. Mi vista se enfoco en la foto de Edgar dónde me abrazaba.

Me haces tanta falta.

Mire el vestido Dorado que Vicente me había regalado.

Sabía el parecido que había entre él, serafín y yo, sin duda era algo de cuestionar.

Me puse el vestido, y no puedo negar el buen gusto que tiene.

Iván.

–Pero como se tarda la Evita– dijo Alfredo mientras que Ovidio que comía una hamburguesa le daba la razón.

– ¿Quién es Eva?– dijo Rodrigo notablemente confundido.

–Hermana de Iván y Alfredo– dijo Serafín mientras tomaba de su cerveza– ¿Sabes quién es la belleza sinaloense?– dijo mirándolo. A lo que Rodrigo asintió–Ella es Eva.

–No joda– dijo vienos– pero ni se parece a ustedes cabrones– dijo mientras nos veía.

–Tiene más genes de su apa– dijo Alfredo ganándose una mirada mía, de Vicente y Serafín.

–¡Pero mira que chula estás Evita! Tú no lo sabes pero serás mi esposa– grito Ovidio hacía la puerta– Es broma pues– dijo cuando todos en la mesa lo miramos serio.