Veintitrés.

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—H-hola?—la señora Jeon sonrió impactada, caminando hasta los menores. Era impresionante ver tres niños más, como sus hijos.

Jimin dio una reverencia, junto a sus hermanos, saludando con una hermosa sonrisa.

—hola, disculpe que estemos a si en su casa…pero sus hijos tienen algo pendiente con nosotros—expuso Jimin haciendo que la mujer mire a sus hijos aún impresionada.—Gguk.

El susodicho tembló, sonriendo a su madre y una mueca al Omega. Vaya que sorpresa la que se había llevado, pensaba que se había echó en los pantalones.

—p-pos supuesto, digo; pasen están en su casa…taehyung querido ayúdame con este desorden—estaba avergonzada, habían echo un desastre para los pasteles en la mesa, y que tres omegas muy bien vistos entrarán a si a su casa le hacía querer correr y no mirar más sus rostros, que vergonzoso.

Taehyung sonrió saludando, ayudando a su madre. Minhyun le sonrió ladeado, cosa que hizo que Jungkook bufara tomándolo del brazo y subir las escaleras con el. Los demás no hicieron acto de nada ante los reclamos del Omega. JimSu apretó los cachetes de jungSeo besándolo una y otra ves, aún que el alfa estaba procesando la situación, el mayor sonrió subiendo por igual las escaleras con su Omega, pidiendo disculpas. La señora Jeon estaba sonrojada, la pena y lo que sus hijos hacían le estaba avergonzando más de lo que podía estar.

—discúlpalos, ellos son unos..

—tranquila señora Jeon, mi nombre es park Jimin, ellos son mis hermanos…bueno como pudo ver, se los llevaron…pero igual son mis hermanos la entiendo—la mujer sonrió detallando cada expresión del Omega. Jamás había visto un chico tan andrógino y muy hermoso.

—¿Por qué están aquí?, Aún sigo molesto sabes, y confundido—susurró Gguk en la oreja del menor. Jimin le miró de reojo ignorando lo. Cómo odiaba que hagan eso, el alfa estaba molesto.

—estoy impactada, jamás pensé que mis hijos tuvieran, parejas…—susurró la mayor tomando las cajas de los pastelitos.

—puede pasar de todo en esta vida señora Jeon—dijo Jimin, ayudándola.

—oh, no, no, no debes ayudar este de…—sin embargo el menor la interrumpió tomando las cajas, y ayudarla.

—no se preocupe, tengo dos hermanos que hacen destrozos en casa—le sonrió a la mayor ayudando a limpiar.

La señora Jeon asintió con una sonrisa suave.

JimSu entró al cuarto de JungSeo tirándose a la cama del mayor.

—estoy molesto, sorprendido, y un poco confuso ..ahora ven y cuéntame todo—dijo el alfa palmeado sus piernas. El Omega asintió sentándose en el y contarle todo, desde la cita, asta en ese momento…—nos jugaron muy bien.

—de echo si, ustedes son algo…bobos.

—oye, mi intelecto es más grande que el de mis hermanos—refutó.

—JungSeo—el Omega cambio su expresión, alertando al mayor.—lo que te dije de casarme no es una broma.

—lo se, mis hermanos están en situaciones similares—suspiró pensativo.

—JungSeo, ¿Tu, enserio quieres tener una relación estable?—el alfa le miró. El Omega tenía sus ojos apagados, llenos de inseguridad.

—bueno, umh…casarse es algo muy grande, es peor que tener una rela….—no termino de hablar ya que el Omega lo empujó caminando a la salida—espera a dónde vas—las carcajadas del alfa y los gritos de JimSu, llamaron la atención de Jimin y la señora Jeon.

UN enredo de TRES. (Omega verse).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora