UN enredo de TRES. (Omega verse).

GgukMin

Jimin miraba la cuna dónde su bebé dormiría. Park sonrió deslizándo sus dedos sobre el cojín rosado, abrazándolo con suavidad. JungGguk limpio la pintura en su mejilla, el alfa sonrió al ver a su Omega.

-estas ancioso-dijo metiendo la brocha de pintura en la cubeta, alejándose al ver su gran trabajo. Todo el cuarto estaba pintado de un rosa pastel suave, con dibujos decorativos. Jimin asintío mirando el cuarto de su pequeña.

Ellos ya sabían el sexo de su cachorro, yendo al ultrasonido con sus hermanos, y darse cuenta del sexo de su primogénita.

-tu también estás emocionado, aún que no puedo negar que estoy nervioso-responde siendo abrazado por el alfa.-me imagino que los demás ya tienen todo.

-Seo está igual, o peor que yo. Creo que el único cuerdo de nosotros es Jungkook con Minhyun, ellos parecen estar bien con la fecha programada.-suspira mirando su obra de arte.-nuestea princesa, estará feliz por su cuarto.

-claro-ambos sonrieron sacando fotos.

Una pequeña niña de ahora siete años entro al cuarto, abriendo enorme sus ojitos, emocionada por las cosas que habían en el cuarto. La señora Jeon sonrió enternecida. Era bellísima. -hola, pasen-Jimin abrazó a su suegra, dándole un beso suave a la pequeña, quien miraba todo ilusionada.

-les quedo hermoso, ya me imagino a mi nieta durmiendo en esa pequeña cuna-apuntó la cuna alta, con bordados y dibujos en la madera, de un color rosa apagado, estilo princesa. JungGguk sonrió orgulloso, tomando a Rose en sus brazos. La pequeña miraba el techo decorado con suaves estrellas.

-me emociona todo esto, pero por qué tiene que ser rosa todo?-dijo taehyung entrando al cuarto, seguido por Hoseok. El Omega de cabellos ahora blancos claros sonrió emociónado por el lindo decorado.

-a mi me gusta el rosa-dijo jimin, sacándole una sonrisa al mayor. Pues su cabello estaba rosado, y le quedaba todo lo rosado; aún que su carácter no era rosa precisamente.

-bien, es hora de salir. Jimin prepare tu postre favorito-dijo la señora Jeon, tomando la manita del Omega y salir seguida por los demás. JungGguk dió un último vistazo al cuarto cerrando la puerta.

Jimin y JungGguk seguían en el departamento que su madre pagaba en la universidad; era grande y suficiente para ellos dos, además Yoongi le dijo que era un regalo para su sobrina, ya que se emociono saber que habría una niña en la familia; no estaba mal tener hermanos omegas, pero necesitaba la voz dulce de una niña, como Rose. La pequeña había caído bien con el pálido.

La señora Jeon les vicitaba, aún que aveces la mujer se quedaba a dormir con su pequeña; a Jimin le encantaba tenerla en casa, ya que le ayudaba mucho en su estado. Taehyung había dado un paso importante en su relación con Hoseok, pues le había pedido matrimonio. Los trillizos casi lloran por la noticia, tanto park y Jeon. La señora Jeon estaba feliz, sus hijos habían sentado cabeza, y eso era bueno. En tan poco tiempo había conocido a omegas tan dulces y características diferentes con rostros iguales. Ella era feliz al saber que cuidaba de más hijos, aún que no los hubiera tenido, pero sabía que estaban en buenas manos.

-¿hobi cómo vas en tu clases de idiomas?-preguntó Jimin, tomando platos y ponerlos en la mesa, con ayuda de su suegra y cuñada. Rose amaba servir, era una niña atenta y siempre acariciaba la pancita del mayor.

-muy bien, de echo ahora podre seguir avanzando con el francés-responde orgulloso. Jimin asiente sonriendole con el mismo sentimiento.

La familia se ubicó en la mesa. JungGguk se quejaba por qué la pintura le había provocado alergia, y Jimin le consentía como el niño grande que era. Taehyung hacía bromas de su hermano cuando esté no había conocido al Omega. Jimin a veces las tomaba bien, y a veces miraba mal a su alfa. La mañana paso, y la familia se fue dejando a la pareja sola.