Pasaron pocos días después de lo anterior, los tres habían pasado muy buenos días juntos en la pequeña cabaña. Beber, cantar, bailar, juegos de mesa, realmente la estaban pasando bien.
-La comida está hecha!- Se escuchó a Jang desde la cocina, Jin y tú se levantaron de frente del árbol de navidad para caminar a la cocina. -Uy chico que tienes ahí?- Jang tomó el rostro de Jin para empezar a quitarle brillos.
-Para, para... Para ... Que pares hostia- Se intentaba safar de la mano dura de Jang.
-Deja a Jin quieto Jang-
-Nah, y tú también tienes mierda en la cara- Ahora la cara que sostenía era la tuya con fuerza mientras quitaba los brillos de tus mejillas. Jin y tú dieron una risa suave para luego comer juntos. En la sala abrieron los regalos que habían comprado durante esos días en los que, habían hecho varios viajes a la ciudad para comprar las cosas. Todo estaba envuelto en tres diferentes colores para identificar para quienes eran. Se sentaron alrededor los tres en pijama. Jang tenía una pijama de Grinch, Jin tenía uno de Saitama (One punch man, no lo sé, creo que sería muy fan) y tú uno de Venom.
Juego de piedra, papel o tijera, como siempre tenías que añadir tu toque. Los analizabas mucho al jugar ello pues dependiendo de ese juego tomaban muchas decisiones, Jang y Jin casi siempre sacaban lo mismo. Así que propusiste que si había un empate debían darse un beso, almenos hasta que alguien ganara. No tenías nada que perder.
Primer juego, Jin y tú empataron, segundo juego Jang y tú empataron, tercer juego, los dos rubios sudaban rezando por no salir parejos. Por suerte Jang y tú empataron otra vez. Oh pero el cuarto juego fué la vencida, Jin y Jang empataron.
-No se vengan a dar un pico- Amenazaste sacando la cámara.
-Y tu desde cuándo pones todas las reglas!?- Jin te miró maldiciendo con la mirada.
-Ven aquí idiota- Jang tomó a Jin del cuello de la pijama atrayendolo a él para besarlo. Jang no soportaba perder retos pero siempre cumplía los castigos. Tu Fujoshi interior brincaba de felicidad mientras por fuera era una línea de sangre bajando de tu nariz.
Finalmente decidieron no seguir el juego gracias al traumado de Jin y eligieron a Jang para iniciar a abrir regalos. El tomó primero el más grande, desenvolviendolo con emoción, sacando al fin un juego de Legos en colaboración con Mario Bros. No pregunten cómo le salían brillitos de los ojos y les calló a besos a ambos (al parecer si es medio joto jajajaja). Luego unos tennis con un estilazo bien vergas digno de Jang. Aún Air Frier (quien no quiere uno?) Y un libro de recetas latinas (por el cuál lloró como niño pequeño.)
Luego pasó el turno a Jin, quién agarró el más pequeño primero. Sacando unas pantallas para hombre.
-¿Y yo como me pongo esto?-
-Ya después veras- Dijo Jang con una sonrisa orgullosa pues él se lo había comprado.
-Jej, muchas gracias Jang-
-A ver dame un beso-
-...no-
-Andale porque no? Aquí todos nos amamos- TN reía ante su propio comentario y luego Jang le siguió la risa.
-Maricones-
-Como nos llamaste???- Jang saltó sobre él -Ven aquí también te voy a regalar una violada- Mientras Jang hacía un intento por quitarle la pijama T/n se reía como mosquito moribundo mezclado con mula con diarrea en el piso.
-No!! Jang!! Suéltame hijo de puta!! Ahhhhhhhh!!! Me va a violar 911!!! Llamen a la policía!!! Me están matando!!!!- sonido de siper bajandose- NO!! SUÉLTAME!!!
