Conocidos ⟪l.s.⟫

❁1❁

—Ok, ahora escucha esto, la casa era muy grande.

—¿Qué tan grande...?

—Grande como MUY grande, si lo midiéramos en cantidad espacio de elefantes, tal vez unos, mil o 2 mil probablemente, pero no elefantes, elefantes, sino elefantes, ELEFANTES, pueden comerse todo el menú de McDonald's's 3 veces y todavía van por unas órdenes de tacos para el postre.

Harry estalló en una carcajada —Mi mente cree que exageras, mi corazón quiere ser amigo de esos elefantes.

—Bueno tal vez no 2 mil elefantes, pero los 500 que caben son bastante cool y buena copa, luego te los presento les vas a caer bien.

—Lou detente con los elefantes— dijo risueño —entiendo, la casa era grande, GRANDE, y luego.

—Cierto, el punto es que la casa era grande del tipo que si de un lado de la casa gritas como loco desquiciado no hay manera de que te escuchen del otro lado de la casa, malditamente ridículo.

—Me imagino que lo comprobaste haciendo algo estúpido.— Harry dijo con tintes de burla ante el notable resentimiento del ojiazul hacia aquel lugar.

—En mi defensa no fue mi culpa y tampoco es como que supiera que nadie iba a atender a mis gritos de agonía, deberían darme una medalla o alguna mierda así por sobrevivir a esa catástrofe, a ese evento desafortunado que hubiera cobrado la vida de este hermoso ser bajado del ciel-

—Lo tengo— lo interrumpió Harry —soy suertudo por tu valentía. Ahora deja de divagar hombre, sabes que me encanta escucharte, pero en verdad quiero saber que pasó.— dijo haciendo un puchero.

—Solo porque me caes bien permito que me interrumpas— le guiñó un ojo y siguió —el caso es que estos señores dueños de la casa invitaron a mis padres a una fiesta de señores con traje y platica aburrida, algunos llevaron a sus hijos y yo a mis escasos 8 y con la habilidad social de señora que regatea en el mercado, me hice su amigo y nos escapamos a jugar alrededor de la casa.—

—¿Qué jugaron?... yo la verdad juegue a muy pocas cosas de niño, nuestros padres simplemente querían que nos sentáramos y nos calláramos incluso cuando no estaban cerca.— melancolía filtrándose entre sus palabras.

—Ey no, no quiero que recuerdes eso ahora, podemos jugar juntos todo lo que nunca pudiste y escribir algo nuevo para tu mente, nunca es demasiado tarde; pero antes terminemos la historia de cómo me desangre por 6 días seguidos y sobreviví como campeón.— dijo el ojiazul con la sonrisa más reconfortante que jamás se haya visto.

La sonrisa del rizado se ensanchó y brilló como el verde de sus ojos —Ok dale, cuénteme como sobrevivió oh amable y valiente guerrero.— dijo con un dejo de burla.

—Prosigo entonces mi fiel seguidor— dijo con elegancia, Harry golpeó su brazo y puso los ojos en blanco —¡ouch!, que grosero, aparte no hagas eso con los ojos que te vas a quedar bizco— ambos soltaron una carcajada —bien, el caso es que yo y mis nuevos amigos jugábamos a las escondidas, un clásico, diversión o abandono seguro; yo demasiado inteligente me pareció la idea del siglo correr a la habitación más lejana a la que pudiera llegar, algunos niños pensaron lo mismo y me siguieron. Llegamos a un cuarto enorme con sillones elegantes y colecciones de mierdas caras, me escondí detrás de dos sillones ridículamente grandes y la verdad estaba bastante cómodo ese piso y yo me había despertado abusivamente temprano para un niño, que te puedo decir...