Maratón 1/4
19 de julio, 2021
Ammbar:
—¿Entonces? —miro a Max que me sonríe—. ¿Vas a ser mi compañera?
—¿Podría negarme a bailar con Ken? —deja de sonreír y yo río.
—Ahora no quiero bailar contigo —río más y tomo su brazo cuando va a irse—. Voy a buscarme otra compañera.
—Oh sí, claro, como si quisieras bailar con alguien más.
—Sólo porque hace mucho bailamos juntos y nos entendemos, si no, me buscaría a otra.
Dejo su botella de agua en una esquina ya que olvidé la mía y le sonrío.
—Eso sonó a reproche en un matrimonio de 20 años —sonrío y se encoge de hombros.
—Sólo hace falta que nos casemos —río y niego.
—Vamos, a practicar, que tenemos jueces que impresionar.
—Eso rimó.
Vamos a un salón aparte ya que debemos hacer un baile de pareja con alguna canción que los profesores eligan.
Luego de un rato, Samuel, el profesor, nos da la canción y nos ponemos a armar la coreografía.
—¿Por casualidad conoces a algún tatuador que sea bueno?
—Mmm... yo no conozco a ninguno ya que no tengo tatuajes ni creo hacerme alguno. Pero le puedo preguntar a Nat.
—Eso sería genial. No quiero hacerme mi primer tatuaje con cualquier persona.
—¿Qué vas a hacerte?
Comenzamos a hablar sobre el tatuaje que tiene en mente y se molesta cuando le digo que se tatúe a su primer amor, Barbie, pero luego de un rato se le pasa.
—No sabía que ibas a venir —digo viendo a Enzo en el auto cuando Felipe me busca de la academia.
—Vine a traerte esto —me da una botella de agua y le sonrío.
—Gracias. Aunque Felipe podría habérmela dado, no hacía falta que te molestes en venir.
No me responde, sólo me mira serio como dudo alguna vez deje de estar e ignora lo que dije.
Intento poner un poco de distancia más allá de los eventos, o no se me va a hacer fácil dejar de lado mis sentimientos.
Pero él no ayuda.
—Debes dejar de olvidártela, vas a deshidratarte.
—No te preocupes, Max siempre me comparte de su agua fría —digo a la vez que el auto avanza.
—¿Max? —volteo a verlo y tiene el ceño fruncido.
—Sí, mi compañero de baile, bailaba en mis clases anteriores también —su ceño se frunce aún más.
—¿El rubio?
—¡Sí! Yo le digo Ken —río—. Odia que le diga así.
Él no ríe. Sólo frunce el ceño.
Al ver su camisa blanca y su cuello, lo recuerdo.
—Hablando de Max. ¿Podrías pasarme el contacto de tu tatuador de confianza?
—¿Por qué?
—Porque quiere tatuarse y no con cualquiera, iba a preguntarle a Nat, pero ya que estamos aquí y tú tienes muchos, pues...
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Sin Querer Queriendo (#1 Trilogía Tratos)
Romance"Esos ojos podrían poner a mis demonios de rodillas" Ron Israel. 1° de la Trilogía Tratos. Historia completamente mía, no copien y sean creativos. Portada hecha por mí.