˚ ִֶָ 🗝️ ♡︎ ₊ 𝑆𝑒𝑥&𝐶𝑎𝑛𝑑𝑦!

O33

Era la segunda vez que podía a Yuta en peligro.

Era la segunda vez que una de la personas más importantes en su vida desaparecía.

Debía encontrarlo.

Había sido su responsabilidad y lo había dejado ir.

Cuando Sunghoon abrió la puerta Sunoo alzó inmediatamente la vista hacia él.

—Hoon...

Su esposo entró a su casa.

—Sunie ¿Qué haces despierto tan tarde?

Sunghoon había estado buscando información sobre el paradero de Yuta pero no había nada.

No llamaban.

Nada.

—Quería saber si...tenias algo.

Sunoo fue a abrazar a su esposo.

Escondió la cara en el pecho del menor y este acarició sus cabellos.

—Hyung, hacemos lo que podemos.

Habían visto los vídeos de seguridad. Habían visto una y otra vez a Yuta entrar a los baños y no salir.

El corazón de Sunoo se sentía débil y cansado.

Su mente no lo dejaba dormir sin pesadillas.

Hyuna estaba a semanas de su parto, y si no encontraban a Yuta, este no vería nacer a su hermano.

Todos los amigos de Yuta le habían mandado cartas a su nonna y a él dándoles fuerzas pero era desgarrador saber que su niño estaba con desconocidos.

¿Qué podían esperar de gente que se beneficiaba con el dolor de los demás?

Nada.

Simplemente esperar que el pequeño estuviera bien.

En cambio Seongmin era un caso aislado.

No le había dirigido palabra a Sunoo y se la vivía encerrado en su habitación.

El único con el que hablaba era con Minhee y con Sunghoon que lo mantenía al pendiente de el avance con el niño.

Cada paso que daban ya había sido planeado por los secuestradores.

Cada cosa.

El teléfono sonó.

Sunoo contestó de inmediato.

¿Y si eran ellos?

—¿Bueno?
—Hola Sunoo, habla HyunSeung. Es Hyuna, va a tener al bebé.

Sunoo se sorprendió.

Eran las dos de la mañana. Pero los bebés no esperan.

—¿Ya? ¿No estaba planeado para un mes?
—Es un bebé prematuro. Hyuna me dijo que te avisara.

Sunoo pidió la dirección del hospital. HyunSeung se la mandó y colgó.

Normalmente no le gustaba salir.

Riki le insistía en que debía hacerlo, pero simplemente era difícil tratar de sentirse normal cuando por su culpa estaba en esa situación.

Todos habían sido comprensivos con él. Incluso Riki dejó de ignorarlo y le daba cariñitos para consolarlo.

—Nonna va a tener al bebé. Es prematuro ¿Me llevas al hospital?

Sunghoon asintió.

Sunoo al fin se cambió de ropa y se puso una gorra para cubrir su suave cabello.