Golpeara seres ya muertos no era para nada complicado, sin embargo, si eran muy fastidiosos. Para ellos, pan comido, pero para los habitantes eran una pesadilla hecha realidad, y ni hablar del ejército de cerberos.
— ¡Siento que tengo fuerza! — exclama Haknyeon.
El había recuperado sus poderes, o eso era lo que parecía. Sus movimientos eran rápidos, muy rápidos. Le alegraba que su compañero se encontrara bien, por lo menos estaba bien.
Pero ChangMin... SangYeon le había dicho que no estaba muerto, aún tenía vida, pero estaba sellado con una maldición ¿desde cuando SunWoo puede hacer maldiciones? Esto era obra de Juyeon, no había otra explicación.
《Juyeon...》
Todo era su culpa.
Si tan solo él hubiera desarrollado mejor sus habilidades, si tan solo se hubiera confirmado con lo que tenía, si tan solo no hubiera leído aquel libro esa vez... él fuera uno de los suyos, Juyeon estaría gobernando un pueblo como todos los demás Dioses, Sol estaría junto a ChanHee y tuvieran una familia juntos, YoungHoon no estuviera desaparecido, Haknyeon nunca hubiera pasado por la crisis de debilidad, y ChangMin estaría en perfecto estado, con ellos... todos estuvieran felices.
Jacob y Kevin se habían llevado a ChangMin donde Yeriseth y Moon, ella sabrían que hacer con él. Mientras que Hyunaje había ido en busca de Eric, casi ni sabían de él, no era muy común verlo.
Por otro lado, Chanhee estaba sentado en un tronco, sus manos sostenían su rostro, y su codo estaba sobre sus rodillas. Se encontraba muy pensativo, tanto así que sus ojos se empezaron a cristalizar por hacer contacto con el aire por mucho tiempo. Yunho, quien, debido a los ataques, tenía parte de sus extremidades envueltas en restos de telas rasgadas de sus prendas, se sentó junto a ChanHee captando su atención.
— ¿Estás pensando en mí hermana? — pronuncia Yunho mientras limpiaba su arco.
Chanhee se mantiene en silencio. No había momento en el que no pensara en ella. Tenía que admitir que le llegó a gustar Sol, lo que en un momento fue solo un simple interés de poder, ahora era amor. Sí, amor, se atrevía a decir que de eso se trataba, estaba muy seguro de lo que sentía.
Claro que los Dioses aman.
Ellos se enamoran.
También enloquecen por amor.
Hasta matarían por amor.
— Ella te admiraba y te respetaba mucho, estaba dispuesta a hacer todo por ti — informa el joven humano — Claro, que no estaba seguro si ella quería tener una familia con un Dios.
— Yo no la obligué
— No, pero tampoco le distes alternativa. Y ahora ella no está.
—¿Dices que yo la he conducido a su muerte? — cuestiona el Dios de la luz sin poder creer tal acusación del contrario.
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THE GODz ͟͟͞͞➳ The Boyz
FantasyUn mundo reinado por dioses, en donde la discordia y la codicia aparentan más fuerza que el amor y la justicia. - Me he aburrido de aquello, los humanos son tan patéticos; viven para morir, y tratan de huir de los problemas como si pudieran escapar...