Las prácticas de Shenhe y Aether seguían en pie, en realidad no es que todo fuera perfecto o, por lo menos, pasable. Muchas de las pruebas sí que las aprobaba y de forma más o menos satisfactoria, dependiendo de cómo hiciera sentir a sus contrarios.
Por ejemplo, si alguien le sonreía después de una compra o de una buena acción, ella regresaba el gesto de forma linda, y eso era lo mejor que podía suceder.
Lo peor era cuando una persona se portaba grosera con ella, ahí detonaba su violencia natural, razón por la cual, si bien no era algo físico, verbalmente podría ser bastante dañina, insultando a rajatabla, fuera quien fuera quien la sacara de sus casillas, lo que, por suerte, casi no sucedía.
Ambos se encontraban en la casa después de un largo día de práctica, los dos se encontraban de nuevo en la cama y en la hamaca de forma respectiva. Comprar esa colcha sí que había funcionado y, sin embargo, la dama de cryo seguía sintiendo un frío que no terminaba de entender, pero le costaba trabajo conciliar el sueño debido al mismo.
-Me alegra que has ido progresando. A tu ritmo, claro, pero no por eso es malo. Solo es cosa de controlar un poco más tu temperamento y estaremos sanos y salvos. -Rió él.
-Me cuesta mucho trabajo...incluso con mi alma atada. Supongo que debería buscar maneras de tranquilizarme cuando me crispo.
-Respira, cuenta hasta 4, exhala, cuenta hasta 4. -Sonrió el muchacho. -Eso suelo hacer yo cuando me enojo con Paimon.
-Lo probaré cuando lo necesite.
-Esperemos que no sea pronto. Buenas noches.
-Hasta mañana... -La inexpresiva mujer miró a Aether por varios segundos, llevándose las manos al pecho. A pesar del calor que sentía por la colcha que tenía, esa sensación de frío no podía ignorarse así sin más. -Oye... -Le dijo.
-¿Sí?
-¿Te molesta si dormimos juntos?
-Para nada... -Respondió él, extrañado.
No le molestaba que así fuera, le apenaría un poco el que algo dentro de sí se saliera de control y Shenhe lo notara, eso lo mataría de vergüenza, aparte de que no quería hacerla enojar. De cualquier manera, ya tenía una estrategia para evitarlo.
Tomando una de las almohadas que eran, más que nada, decorativas, la puso en medio de ambos, así si es que él llegaba a tener una para nada deseada erección, no se daría cuenta.
-¿Por qué querías que durmiéramos juntos? -Dudó él.
-Tengo frío todavía, y cuando compartiste cama conmigo, no lo tuve.
-Yo tengo calor, irónicamente. Pero está bien, la cama es cómoda.
Ella lo abrazó con fuerza, ese vacío que sentía en el alma y el calor que le faltaba a su corazón se llenaron, iluminándola de una manera en que pudo cerrar sus ojos para finalmente dormir.
El muchacho lo interpretaba de una manera simple: tantos años sin afecto humano, durmiendo sola y sin calor, la hacían necesitar del mismo para poder dormir. En pocas palabras, Aether era el oso de felpa que Shenhe necesitaba para dormir. Y sí, su indagación era de lo más acertada, ahora que podía tener todo lo que había deseado desde hacía tantos años, no lo desaprovecharía.
Aether colocó su mano en la cabeza de su amiga, mirándola dormir, tan tierna y que transmitía una inmensa paz. Prontamente bostezó de forma pesada, quedándose dormido al poco rato.
Despertando a la mañana siguiente, a él le costaba trabajo respirar, sentía como si le apretaran el tórax, y solo al abrir los ojos, se percató que Shenhe lo tenía bien abrazado a ella, y que su pecho estaba pegado a los senos de la mujer.
ESTÁS LEYENDO
Take My Breathe Away (AetherxShenhe)
Fanfiction"Si alguien debe morir para salvar al otro, prefiero ser yo" Tras acabar con la esposa de Ostial, Shenhe empieza a introducirse al mundo humano tras más de 20 años de estar ausente del mismo. Aether, el que hasta ese momento es su único amigo, la ay...