Take My Breathe Away (AetherxShenhe)

Capítulo 23. -Asedio final.

Justamente en esa noche, lo único que iluminaba el mar y a la Cámara eran la luz de la luna. Se habían iniciado los bombardeos horas antes, para evitar que se destruyeran puntos estratégicos, se había optado por apagar las luces de toda la ciudad, pues eso impediría tener una visibilidad clara de los objetivos a atacar.

Si bien no era parte del plan inicial, Aether podía sacarle provecho, así que, y aunque fuera arriesgado, decidiría adelantar el plan. Lo que él no tenía en cuenta eran los vigías puestos en la Camarada de Jade, cosa que daba realmente igual.

Kazuha se había liberado sin mucho problema de sus ataduras, tomando una espada, si bien no familiar para él, serviría para su cometido, así como robar su propia visión de sus captores, pues con su habilidad y sigilo, había logrado escabullirse sin problema.

Él que sabía bien cómo llegar a la cámara de Jade, apenas lo logró, cosa que tampoco le fue muy difícil, pues al estar él solo atravesando el mar usando la misma técnica de antes, por lo que usando su espada y las sombras como su cómplice, fue ultimando uno a uno a los guardias de la cámara, llegando a una zona importante, que era justamente donde se encontraba el emisario.

Cuando Kazuha estuvo por atravesarlo, el emisario lo tomó del cuello, sorprendiendo al muchacho.

-¿Creíste que los del abismo tenemos las mismas habilidades que los humanos? Eso en realidad yo lo dudaría.

El muchacho terminó siendo lanzado hacía una de las paredes, destrozándola, Kazuha se puso de pie inmediatamente, corriendo para luchar contra su enemigo, que esquivó sus ataques con cierta facilidad.

El emisario formó dos espadas de hydro, con las cuales se puso a atacar al joven espadachín con fuerza y velocidad, destruyendo un escritorio de un solo golpe, fue ahí cuando Kazuha se dio cuenta de lo que en verdad pasaba.

Keqing entraba corriendo para ver qué ocurría, y claro, se colocó al lado del emisario del abismo, preparando su espada.

-Ya está mojado, solo es cuestión de que le caiga una pequeña chispa y no podrá ni moverse. -Rió el emisario. -Haga lo suyo, Keqing. No tenemos tiempo que perder.

-Lo sé. -Ella volteó rápidamente, lanzando una cuña electro que le atravesó el cuello al emisario, haciéndolo retroceder algunos pasos mientras abría los ojos de la sorpresa.

-Tú, puta... -Susurró. Kazuha se lanzó para decapitarlo de un solo tajo, solucionando el problema.

-Kazuha. -Ella lo abrazó. -Pensábamos que estabas muerto.

-Casi, pero todavía no es turno de este lobo de mar. Ahora explícame, Keqing, ¿qué pasó? ¿Qué haces aquí?

-Es una larga y complicada historia. -Suspiró ella, sabiendo que había cosas que no le gustaría tener que contar, pero que pocas opciones le quedaban, en realidad.

Tras explicarle todo lo sucedido, el hecho de que fue chantajeada por Lumine, el que ahora Shenhe estaba bajo control del abismo, algunas cosas que se sabían acerca de Ninguang y de Beidou, así como de la misma geoarmada, la guerra iba muy mal para el abismo, sin importar todos los recursos que se pudieran tener.

Ahora Kazuha expuso el hecho de que se planeaba una invasión a la ciudad desde dos frentes principales, uno era por las montañas del oeste y la otra por el puerto, solo que no tenía una fecha segura.

Poco importó ese detalle ya que más rápido de lo que se pudieron percatar, ya se escuchaban varias explosiones y gritos en la ciudad, así como verse fuego en el muelle.

-Son ellos. -Kazuha tomó su espada. -Tenemos que ir y...

-No puedo...debo quedarme, Ganyu todavía no está segura, no hasta que ella sea detenida.