Lovesick [#1] ✔

19

✚ EVAN BLACKWOOD ✚

Ethan Blackwood.

Abbie Gress.

No tenia ni la mas mínima idea de como llegue de regreso a casa, había manejado durante horas a costa de que podría desplomarme en cualquier momento.
Aprieto el volante con fuerza mientras cierro los ojos intentando que la situación no se vuelva mas difícil, sabia que tendría que enfrentar a Emilio y Jake tarde o temprano, y era un completo infierno para mi cabeza siquiera pensar lo que ocurrió y que la razón de las mil llamadas de mi hermano significaban que efectivamente me esperaba una larga noche.

Miro por la ventana hacia mi izquierda y se encuentra la casa de Jake; mi consciencia me reprocha lo cobarde que he sido estos días; no lo veo desde esa noche, no me he atrevido a contestarle nada u enfrentar la situación por cobarde, y estoy seguro que he provocando un enojo en él que no será para nada fácil de deshacer.

Suspiro sin remedio y abro la puerta para después cruzar la acera y terminar frente a su porche, con las manos sudando a mis costados y con el corazón en la mano. Esperaba cualquier reaccion de su parte, sea lo que sea sabía que me lo merecía, después de todo no debí haber cedido ante nada, porque sabía que estaba destrozando a mi hermano y traicionándolo. Ojalá pudiera retroceder el tiempo para así evitar toda esta situación.

Me atreví a dar un paso, y al estar frente a la puerta la cobardía hizo acto de presencia nuevamente, era frustrante sentirla después de todo lo que he hecho.

Toque la puerta despacio y me sorprendió que se abriera sola, encarne una ceja y la empuje nuevamente para que se abriera del todo de modo que pude observar el oscuro interior, y luego sentir a un extraño frío recorrerme la espina dorsal. No era propio de Jake dejar su casa así de descuidada.
Aún un poco desconcertado ingrese en la sala; todo parecía estar en orden, pero algo seguía sin ir bien para mi.

Escuché algo a mis espaldas y voltee rápidamente, no me dio tiempo de divisar a la persona que se encontraba frente a mi, solo se que me pego un golpe tan fuerte que simplemente me desplome en el suelo perdiendo por completo el conocimiento.

[ *** ]

—¡Evan! ¡Despierta! —una voz lejana me llama, me removí un tanto incómodo y poco a poco abrí los ojos con dificultad en un intento de acostumbrarme a la claridad que entraba por una ventana pegándome directamente en el rostro —Evan, maldita sea, despierta.

Parpadee repetidas ocasiones y por el rabillo del ojo capte la figura de Jake a mi lado, fruncí el ceño e intente moverme, cosa que extrañamente no resulto.
Me removí de nuevo y supe que me encontraba en una cama, recargado en el respaldo de esta y con las manos a mis espaldas, ¿esposadas?

¿Qué carajo?

La desesperación me invadió también, así que forceje para intentar soltarme, pero solamente conseguí un dolor infernal en mis muñecas, sin progresar.

Levante la mirada del tod y me encontré nuevamente con Jake al otro lado de la cama en la misma posición que yo, observándome con lágrimas secas en su rostro y el pecho subiendo y bajando muy rápido.

—¿Qué carajos esta pasando? —exclamé mientras sentía una fuerte punzada en mi cabeza, jadee y observe la sangre que manchó mi hombro. Alguien me golpeo —Jake...

—E-ella... ella esta aquí. —murmuro con la voz quebrada. Estoy seguro que tenía una expresión de intensa preocupación, sentía a la impotencia recorrer mis venas debido a mis jodidas manos esposadas.