Flotantes Pétalos Negros (Drarry) [Spanish Ver]

Quidditch y la Aparición de un Potter Sobreprotector

Estuvieron paseando por Hogwarts durante una hora, riéndose para sí mismos cada vez que pensaban en la cara de escándalo de Severus. Draco sabía que iba a tener repercusiones, pero se estaban divirtiendo demasiado para que a Draco le importara. Finalmente, la necesidad de Harry de compensar la práctica de Quidditch perdida rompió su hechizo de risas.

"¿Juego de buscadores? ¿Al mejor de tres?" desafió Harry.

"Si no tienes miedo a perder", se rió Draco.

Los ojos de Harry brillaron con una competitividad a la que Draco estaba más que acostumbrado. "Nunca me has ganado la Snitch".

"Bueno, eso es porque estaba concentrado en intimidarte", respondió Draco encogiéndose de hombros.

"Al menos eres consciente", se rió Harry. "Acepto tus disculpas".

Draco puso los ojos en blanco. "No fue una disculpa. Era un mero reconocimiento".

"Lo que sea, Malfoy. Aun así, no vas a atrapar la Snitch antes que yo".

"Eso ya lo veremos, Potter".

Ambos marcharon hacia el Gran Lago, accio-ando sus escobas mientras avanzaban. Draco conjuró una Snitch, esperando a que Harry pareciera listo para encantarla.

"Ha pasado mucho tiempo, ¿verdad?" dijo Harry, lo suficientemente alto como para que Draco lo oyera a un metro de distancia. "Volando, eso es".

Draco sonrió. "Harry, hace una semana que no te subes a una escoba. Guárdate tu innegable amor por ella".

"Apuesto a que tú también lo echas de menos".

"Yo sí", confesó Draco, "ha pasado demasiado tiempo desde que me enfrenté a ti en el Campo. Me habría encantado patearte el culo este año".

"Otra vez: nunca me has ganado la Snitch".

"Todavía".

Harry dejó escapar una risa despreocupada. "Claro, si te hace sentir mejor".

Molesto, Draco decidió que demostraría que el imbécil estaba equivocado. Sólo porque una vez Draco se había molestado en levantarse cuando se le daba la oportunidad de burlarse de Harry, no lo haría esta vez. Y esta vez, Draco sería el que robaría la Snitch de debajo de la punta de los dedos de Harry. Y entonces, Harry sería el que intentaría ahogarse en las duchas después del partido.

Enardecido por ese pensamiento, Draco sonrió y aflojó el agarre de su escoba. Se relajó, echando un vistazo al campo que habían elegido para ellos. Aunque nunca se había atrevido a volar por encima del Lago por miedo al monstruoso calamar, Draco no podía negar cómo la adrenalina corría por sus venas ante la perspectiva de desviarse hacia abajo y luchar contra un calamar con Harry. Tal vez su cabeza comenzaba a desatornillarse: ser amigo de Harry es obviamente malo para su salud mental. Lo siguiente que sabe es que Draco lo haría sólo por hacerlo.

'O tal vez', le susurró una parte prohibida de su cerebro, 'siempre has querido ir de aventuras con Potter'.

Sus ojos captaron el más mínimo indicio de oro, y Draco salió de sus pensamientos. Miró fijamente a Harry, que parecía ignorar felizmente la existencia de la snitch. A no ser que Harry supiera que estaba allí y quisiera esperar a que Draco se diera cuenta para cabrearlo de nuevo.

Draco entrecerró los ojos.

No. Harry no era así.

"¿Draco?" Harry llamó. "¿Estás bien?"

Aprovechando la oportunidad, Draco flotó hacia él. Fingió que no había oído la pregunta y que necesitaba que Harry la repitiera. Entonces, asintió ligeramente. "Un poco cansado, sí. Sin embargo, no es nada para preocuparse".