CAPÍTULO 7 🌹

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No nos tomó mucho tiempo llegar al Ovniburguer, y mientras íbamos en el auto pude observar como Tancy y Drystan conversaban de manera natural, pero aun así había cierta inconformidad entre ellos

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No nos tomó mucho tiempo llegar al Ovniburguer, y mientras íbamos en el auto pude observar como Tancy y Drystan conversaban de manera natural, pero aun así había cierta inconformidad entre ellos.

Tancy no se veía muy cómoda con él, pero trataba lo mejor de sí para ser amable y educada. No sabía porque mi amiga parecía negarse a la compañía de Drystan, ya que tenían muchas cosas en común, y ella sonreí con cada ocurrencia que salía de los labios del rubio, lo cual casi no hacia cuando estaba con la bruja.

No me molestaría verla sonreír de esa manera con alguien más, pero no quería que fuera con Drystan.

La idea de verlos juntos empezó a molestarme, y sentí un extraño sentimiento del cual no estaba familiarizada.

¿A caso estaba celosa?

sacudí esos pensamientos fuera de mi cabeza, no quería arruinar esta tarde con mis pensamientos, no esta vez.

Cuando Drystan detuvo el auto, yo no pude parar de hiperventilar. Estaba tan nerviosa, que mis manos empezaron a sudar. No sé porque, pero presentía que él, estaría con nosotros este día.

Creo que mis nervios se debían más al verlo en persona, después de todo lo veía casi todas las noches en mi sueños, y tenía la loca idea de que sabía que soñaba con él.

Al bajar del auto noté una energía extraña a nuestro alrededor, y recordé el sentimiento de miedo de nuevo. Estaba segura de que alguien estaba observándonos.

Observe por todos lados, el estacionamiento no estaba vacío, había una pareja sentada en una de las mesas que estaban afuera, y una familia que estaba saliendo del restaurante. Mi mirada se dirigió al otro lado de la calle y puedo jurar que vi una sombra esconderse rápidamente detrás de un árbol, mi mano toco la herida que tenía en el cuello, recordando al maldito degenerado que me ataco.

—Tranquila preciosa. —el cuerpo de Drystan se interpuso entre esa sombra y yo. —Mientras yo este contigo, nadie se atreverá a ponerte las manos encima. —

Mi mirada conecto con el hermoso color esmeralda de sus ojos. Había seguridad en ellos y una promesa de que no permitiría que nadie se acercara a mí.

Mi cuerpo empezó a relajarse mientras él acortaba la distancia entre nosotros. La diferencia de estatura era notoria, pero de algún modo era como si dos piezas encajaran, era simplemente perfecto.

—Drystan...

—No olvides cerrar la puerta. —con esa sonrisa hermosa en su rostro estiro su mano y cerró la puerta detrás de mí, y escuche como se reía al ver mi reacción.

Maldición, era el peor momento para sonrojarme.

Pero el calor en mi piel empeoro cuando inhale el delicioso aroma de su colonia. Era una combinación deliciosa entre cítrico y el jazmín, una esencia fresca y relajante.

Los Hijos Del Demonio El AbismoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora