Encuentro Nocturno

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El silencio invadió la biblioteca. Para Wei Ying era imposible contarle a alguien sobre su situación.

- ... Lo hice solo por curiosidad, no lo pienses demasiado Lan Zhan. — Dijo Wei Ying restándole importancia al asunto mientras se levantaba para regresar a su mesa.

- ...

Habían pasado varios días y Wei Ying pasaba su tiempo tonteando alrededor, iba a jugar al río, correteaba a los conejos y molestaba a Lan Zhan deliberadamente.

Pero al caer la noche no podía evitar sentirse irremediablemente intranquilo, así que subía al tejado a observar el cielo, solo así liberaba su mente de los pensamientos de su inminente partida.

- Tres... dos... uno... — Murmuró Wei Ying mientras balanceaba sus piernas esperando en el tejado.

- ¡Wei Ying!

Al escuchar aquella voz llamándolo Wei Ying no podía evitar sonreír.

- Lan Zhan, justo a tiempo. — Respondió Wei Ying mientras lo miraba con una sonrisa.

- No puedes estar aquí. — Dijo Lan Zhan con un rostro inexpresivo.

- Vamos Lan Zhan, ¿cuántas veces vas a repetirme lo mismo? — Refunfuñó Wei Ying haciendo pucheros.

- Hasta que me hagas caso. — Replicó el joven jade mientras se sentaba a su lado.

- Jajaja, eso dices, pero aún así te quedas conmigo. — Dijo Wei Ying con tono dulce mientras reía disimuladamente.

- ...

Para ambos estos cortos encuentros nocturnos se volvieron una rutina, Wei Ying rompía el toque de queda, Lan Zhan lo atrapaba, miraban el paisaje en silencio durante un momento y regresaban a sus habitaciones.

- Lan Zhan... — Murmuró Wei Ying.

- ¿Mn? — Respondió Lan Zhan mientras regresaba a mirarlo.

Los ojos dorados de Lan Zhan eran tan hermosos, una mirada suya le transmitía tanta calma, cuando lo miraba Wei Ying sentía que realmente estaba ahí.

- No... no es nada, nos vemos mañana. — Dijo Wei Ying mientras se marchaba.

De repente Lan Zhan lo sujetó del brazo deteniéndolo.

- ¿Eh? — Soltó Wei Ying ante su inesperada acción volteando a verlo.

- ... Nos vemos mañana. — Dijo Lan Zhan en voz baja.

- Sí. — Contestó Wei Ying con una gran sonrisa.

Continuará.

El tiempo que estuvimos juntosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora