♡Convivencia♡

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☆13☆

Cuando Poni se llevó a Emma a su habitación, pasaron cerca de la habitación de Navy — qué también era la habitación de Yuz y Cheery — y vieron como había agua pasando por debajo de la puerta. Poni quería revisar si todo andaba bien con la mayor, pero fue detenida por Emma que negó con la cabeza.

Sabía lo que eso significaba, así que a pesar de estar preocupada por la mayor, decidió seguir con su camino. Sin embargo, antes de que pudieran dar un paso más ella junto a Emma fueron arrastradas hacia adentro de la habitación por Navy. Ambas menores llevaron una mano a su pecho, para luego observar a su alrededor y ver cómo todo el piso de la habitación estaba inundado.

–¿Qué sucedió? – interrogó Poni, preocupada.

– Tus poderes se salieron de control, ¿no? – preguntó Emma, casi al mismo tiempo que Poni y más cómo una afirmación que como una pregunta. Su hermana mayor asintió –Si no aprendes a controlar tus emociones siempre será así.

– Lo intento ¿sabes? Pero no todo es tan fácil como tú lo haces parecer. – contestó Navy a regañadientes. Y Poni no pudo evitar pensar que ambas hermanas en realidad no se llevaban tan bien como ella creía.

– No es mi culpa que la señorita perfecta no pueda hacer algo que yo sí. Además, es la primera vez que logró algo que tú no, déjame ser feliz ¿si? – contraatacó la menor. Navy estaba a punto de responderle pero Poni se le adelantó a hablar, dispuesta acabar con esa absurda discusión.

– Ellos... los demás, ya saben sobre mi secreto – Las expresiones de las hermanas Blue cambiaron enseguida, de unas molestas a unas sorprendidas. –, ¿creen que desde ahora ya no me querrán cerca de ellos por miedo? – su voz se quebró al final de la oración y Emma junto con Navy negaron, para luego acercarse a ella y darle un abrazo.

– No creo que los demás te tengan miedo, aún sí es así nos tienes a nosotras. Ambas siempre estaremos a tu lado a pesar de todo; hicimos una promesa ¿recuerdas? – Emma asintió a las palabras de Navy.

– Por primera vez en la vida puedo decir que concuerdo con Navy  – comentó Emma, sacándole una risa a la pelimorada y haciendo que su hermana rodará los ojos. –¿Qué? Es verdad ¿Acaso quieres que mienta y diga que siempre que tenemos conversaciones te doy la razón cuando no es así?

– Y es exactamente por esto, que tú y yo no nos llevamos bien. Gracias por recordarmelo – dijo, separandose del abrazo que compartía con las menores para caminar hacía a la única ventana de la habitacion.

Cuando estuvo cerca de la ventana, se dió media vuelta en su lugar y en un rápido movimiento elevó toda el agua que había en el suelo, formando pequeñas bolas de aguas alrededor de todo el lugar y lanzándolas una por una por la ventana. Una vez completo su trabajo cerró la ventana y volteo hacia sus dos menores.

–Poni.

–¿Si?

–¿Estarías dispuesta a ayudarme a mí y a Emma a liberar a nuestros padres?

– Espera un segundo. ¿Por qué a ella le preguntas si quiere o no pero a mí no? – se quejó Emma, enojada, pero no por la idea de ir y salvar a sus padres sino con su hermana por decidir por ella lo que tenía y no que hacer.

– Como sea, ¿lo harías o no?  – preguntó de mala gana y Emma asintió molesta. –¿Y tú?– se dirigió está vez a Poni, que aún no había dado una respuesta a su anterior pregunta. La pelimorada miró a ambas hermanas y luego sonrió.

– Las tres prometimos estar juntas en las buenas y en las malas, ¿recuerdan?–las contrarias asintieron– Entonces, ¿qué te hace pensar que no iré con ustedes a salvar a las dos personas que consideró mis segundos padres?– Poni estaba asustada, no iba a mentir pero tampoco podía dejar que dos buenas personas como lo eran los líderes Blue murieran injustamente – ¿Cuál es el plan?

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