Siento como si un hielo frío bajara por mi garganta, no, trabajar con Brad será una pesadilla.
- Oye oye, estás pálida... ¿Es por lo que te acabo de decir?
Los ojos verdes de Brad me miran preocupados.
- No, es que, no he desayunado.
- Bien, yo tampoco, vamos a comer mientras llegan los demás accionistas, tenemos muchas novedades de las que conversar.
La cabeza me da vueltas, no puede ser, trato de calmarme y pido un café junto con un panecillo.
- Oye, tienes que comer más... - musita Brad a mi lado y apenas lo escucho.
- Estoy bien con ésto.
Nos sentamos en una mesa cercana y pasamos los próximos minutos hablando acerca de nuevos proyectos y planes para la clínica, no puede creer que Brad forme parte de mi equipo de trabajo.
Pocas horas después llego a mi consultorio y veo un girasol solitario en mi escritorio, me aproximo y lo tomo en mi mano, no hay ninguna nota, de pronto detrás de mi me sobresalta una voz.
- Quería darte una sorpresa en tu regreso al trabajo.
Volteo y allí está mi hermoso esposo con un ramillete de girasoles en su mano, sus hermosos ojos brillan debajo de su gorra de la NASA.
Se aproxima y me envuelve en sus fuertes brazos.
- Gracias amor - le digo sonriendo y emocionada al verlo allí.
- ¿Qué tal va tú primer día?
Bien, trabajo con Brad
Pienso en la mejor forma de decírselo pero creo que no la hay.
- Ha estado muy bien, genial...
Me mira expectante.
- ¿Pero? Presiento venir un pero...
- Pero... - suspiro. Tocan a la puerta y sin esperar respuesta se abre y entra Brad con una ancha sonrisa.
- Buenas buenas.... Chris, que alegría hombre - le ofrece la mano y Chris quien se ha quedado mudo le devuelve el gesto.
- Ahora Emma y yo trabajaremos juntos ¿Es una locura no?
Mi esposo lo mira sin decir nada.
- ¿Ya almorzaron? Podemos ir a comer y celebrar.
- No podemos, debo ir a casa, a alimentar a los bebés - le respondo.
- Claro, por supuesto, lo dejamos para después... Un placer verlos y felicidades por su familia.
Se retira y Chris me mira.
- ¿Brad? ¿Trabajan juntos?
- Era lo que te iba a decir, Brad compró acciones de la clinica, ahora forma parte de la junta.
- Vaya, eso no lo imaginé nunca.
- Lo sé, yo tampoco, pero la buena noticia es que los accionistas poco vienen acá, son puntuales las ocasiones.
- Es Brad, de seguro estará aquí dia y noche.
- Esperemos que no... Vayamos a casa ¿si?
Chris guarda silencio.
- Cariño, sé que no te sientes bien con ésto, yo tampoco, pero no estemos predispuestos, esperemos lo mejor.
Me mira con pesar.
- Supongo que no tenemos opción.
- Vamos cariño - le doy la mano, y con la otra tomo mi cartera y el ramo de girasoles -. Gracias por ésto, te amo - le doy un casto beso en los labios, ya le haremos cara a ésta nueva situación con Brad.