Luego de ese día todo parecía un sueño hecho realidad, uno de mis tantos sueños acaramelados.Pequeñas miradas fugaces, sus bonitos y profundos ojos azules me miraban de una forma que jamás me habían mirado, me hacia sentir tan feliz como un gato con una caja de cartón, tan feliz. En el desayuno, en la comida, en el camino a la escuela, en la cena y cuando nos cruzamos por la casa.
Pasar parte de mis tardes en su habitación se volvió tan común, más común que antes, si es verdad que pasábamos tiempo juntos antes pero ahora era distinto.
Dulces besos, pequeños y cálidos besos, nada subido de tono, solo pequeños besos suaves, el sabor de sus labios era tan dulce siempre, la vainilla de sus labios se sentía como miel, me estaba volviendo adicto a la miel de sus labios.
(...)
Mis labios se movían torpes contra los suyos, pero parecía no importarle, intentaba guiarme, como mi experiencia era poca me quedaba sin aire muy rápido y no buscaba separarme, el se alejaba suavemente cuando notaba que mis mejillas estaban rojas a más no poder por la falta de aire.
-Entiendo que quieras probarme lo más posible, pero tampoco al grado de morir.- musito en una pequeña pausa que nos dimos.
-Perdón, se me olvida hasta respirar cuando me besas.- reí nervioso, una pequeña risa salió de sus labios.
Se acostó en la cama dónde nos encontrábamos sentados comiendo los labios ajenos. Imite su acción, me acosté en su hombro, quería más cercanía, quería su calidez.
Extendió su brazo para que me acomodara mejor, su mano llegó hasta mis cabellos alborotados, enredo sus dedos entre los mechones, mi corazón latía muy rápido, dirigí mi vista hacía su rostro, su expresión era muy tranquila, a diferencia de mi sentir, el se veía tan tranquilo como si nada estuviera pasando.
-¿En qué piensas?.- hable bajito, sin dejarlo de mirar.
-En nada específico.- soltó sin más.
-Debes de estar pensando en algo.- musite molesto.
-Bueno sí, pienso en cuándo fue la última vez que te bañaste.- soltó una risa burlona.
-¿Ah?.- Me queje a la par que me levantaba, soltandome de su agarré, me coloque de rodillas en el extremo de la cama.
-Pero si me bañe ayer, idiota.- Solo río más alto.
-Solo bromeó Hevs, ven aquí.- se sentó en la cama abriendo sus brazos cómo invitación a un abrazo.
Hice un puchero, pero no podía negarme a hundirme en sus brazos, gatee hasta él, me senté en sus piernas y lo rodee con mis brazos y piernas, el me abrazo con el fin de más cercanía aún, mi cabeza descansaba en su pecho.
-Yo no me quejó del aroma a cigarro qué tienes a veces.- musite casí en un susurró, el cual si escucho.
-Siempre intento sacarme ese olor antes de estar contigo, creo que no lo estoy haciendo bien.- musito mientras que una de sus manos se volvía a enredar en mi cabello.
-¿Siempre fumas?.- pregunté inocentemente.
-No siempre, solo en ciertas ocasiones.-
-¿Qué ocasiones?.- pregunté curioso.
-Bueno, cuando me someto a mucho estrés, cuando tengo mucho que pensar y ya no te diré más, shh.- me calló.
-¿Yo te causo estrés?.-
-No, Heavy.-
-¿Yo causo qué pienses mucho?.-
-A veces.- soltó sin más.

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𝙤𝙝 𝙙𝙚𝙖𝙧 𝙙𝙞𝙖𝙧𝙮, 𝙞 𝙛𝙚𝙡𝙡 𝙞𝙣 𝙡𝙤𝙫𝙚 | 𝘿𝙚𝙚𝙭𝙃𝙚𝙖𝙫𝙮|
FanfictionOh querido diario... -Si realmente es tan listo, ¿como es que nunca se dio cuenta?...- Es tarde ya, es demasiado tarde. -Te amo, te amo Dee, y ya no hay vuelta atrás, ya no puedo sacarte de mi cabeza.- (...) -Te necesito cómo al aire que respiro...