Maldito Edgar

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Terminé de bajar las escaleras, lo primero que observe fueron unos ojos mieles, estos me observaba, le sonreí llegando a él.

-Hola -el fue el primero en hablar.

- Hola, hola- hable animada.

-esas horas de crisis dieron buenos resultados- me observó de arriba abajo guiñando el ojo.

-dejen de coquetear y vamos a cenar- hablo irritado mi hermano jalándome del brazo.

Puse los ojos en blanco soltando un suspiro irritado, me senté en el mismo lugar de siempre en la esquina, aún lado de mi madre, luego en la otra pregunta estaba blake, ethan intento sentarse a mi lado pero fue interrumpido por mi hermano.

- este es mi lugar- lo miro un mal señalando frente a mí al otro lado de la mesa.

-ese es tu lugar- Ethan se sentó en ese lado tensando su mandíbula.

Pellizque con fuerza el muslo de mi hermano mirándolo con una amenaza en mis ojos.

- deja de comportarte como un cabrón- sonreír tratando de disimular el insulto.

Mamá dejó el último recipiente sobre la mesa sentándose con una deslumbrante sonrisa mirando cada integrante de la mesa.

Por mi parte yo solo parecía estar en otro mundo pues tenía muchas insultó de querer gritarle a mi hermano.

Malparido , caca mal hecha.

Fueron muchos insultos que quería decirle pero no lo hice solo me dediqué a respirar hondo observando a quién tenía mi frente sin duda me relajo ver esos ojos mieles.

Estaba dedicado a llevar toda la comida que estaba en la mesa, al parecer sintió mi mirada porque levanto sus ojos haciendo contacto con los míos.

Señaló con la cabeza al hombre de su lado formulando un

¿Es tu papá?

lo dijo en u pequeño susurro pero yo solo me tense observando Simon más mejor conocido como Blake.

Y en uno de esos locos escenarios que uno siempre tiene me lo imaginé siendo un gran padre dándome una gran crianza no como el padre que tenía, toda una basura.

Salí de mi trance volviendo mi concentración a Ethan quién me veía frunciendo el ceño.

Negué dedicándole una pequeña sonrisa.

- bien ¿Quién desea hacer la oración? -mi madre observa cada unos de la mesa esperando que alguien hablara, nadie hablo ni siquiera yo, me hice bolita en la mesa intentando esconderme de Los ojos de mi madre, fue hasta 1 segundos que Simón acepto.

Nos agarramos de las manos cerrando los ojos empezando escuchar la voz de Simón, abre mis ojos con la intención de contemplar un poco a ethan, pero vaya hacer sorpresa él me estaba observando a mí¿Acaso en algún momento Cerro sus ojos? Elevó una ceja viéndome con gracia, yo volví a cerrar los ojos con más fuerza deseando que no hubiera pasado lo de antes.

Pasaron unos 5 minutos y de vez en cuando habría un ojo para observar sí también ethan lo hacía, también en una parte me aguanté la risa para no estallar al escuchar las veces que Simón tartamudeaba.

Pobrecito los nervios lo traicionaban.

-amen - culminó y dijimos todos al mismo tiempo.

Estúpido Ethan  [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora