Princess // Familia Real Británica

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Mami, no pasa nada 👑

22 de septiembre de 1998...

~Narra William~

Mi mente se ha idiotizado hasta el punto de arruinar y lastimar a todos a mi alrededor. Es un patrón que se repite cada tanto y sólo se rompe cuando llega al límite. El límite muchas veces es notar que en realidad el resto están tan rotos como yo, y normalmente incluso más, por mi culpa.

Parece que finalmente abro los ojos luego de tanta estupidez. Ayer en la noche luego de mí conversación con Alan, salí a beber con el resto de los chicos, y digamos que infinitas copas de vino no fueron suficientes para hacer que mi mente deje de pensar en lo que hablamos.

Tal vez tomo la palabra de Alan más que otra ya que él es relativamente callado, y definitivamente reservado con sus emociones y pensamientos reales, entonces cuando habla, presto más atención. Amber debe estar agradecida de tener un amigo como él, porque no sé si hubiera cedido tan pronto si no hubiera sido por lo que dijo.

Realmente me hizo entender que Amber está al borde del colapso por mi culpa, por mis celos, y en el proceso yo sólo lo lastimé a él, y obviamente lloró por mi culpa, podía percibirlo en su rostro y su voz rota. Soy lo peor.

Al final, él tiene razón, como siempre, es totalmente posible que Holly haya mentido. Fue vergonzoso admitir que le pregunté mientras dormía si había besado a Amber, demasiado, y en realidad, él ni siquiera dijo que si a eso, sólo lo interpreté como tal. Pésimo de mi parte, no me reconozco.

Yo soy el problema, ¿Verdad? ¿De nuevo me perjudico por mis propios celos? No diría que son totalmente injustificados, porque han habido evidentes momentos sospechosos y cosas que apuntan a lo peor, pero al fin y al cabo son solo teorías y tonterías de mi cabeza.

Puede que sea así por mi madre... escuché finalmente las cintas proporcionadas por Andrew Morton y en sus palabras escucho mis propios pensamientos. Creer que siempre soy víctima de una infidelidad, ver señales en todos lados, y una vez la idea está en mi cabeza no hago más que darle vueltas y negarme a otra opción. En su caso tenía razón, pero peco de tener el mismo patrón de pensamiento en una situación completamente diferente.

Mi enojo hacia Amber es tan ridículo e injusto. Supongo que necesito tener un culpable que no sea yo para mi infelicidad, y muchas veces le toca a ella, pero pensándolo bien, ella es otra víctima en este juego que mi familia juega contra nosotros para salvarse. Tengo que disculparme con ella, o al menos volver a hablarle como antes, ya que sé que eso arreglará las cosas en un segundo, para bien o para mal, no la veo capaz de mantenerse enojada conmigo.

Por otro lado, Alan me preocupa más, soy totalmente consciente de que lo lastimé ayer durante nuestra conversación, todo por mi propia necesidad de verlo como a un monstruo, se merece mis disculpas. Lo peor es que salió ayer con pastillas, que yo ni siquiera sabía que tenía, y dijo que pasaría la noche en otro lado. Me queda confiar en que ese otro lado sea seguro, que él esté bien, y que no se haya pasado de drogas anoche por mi culpa. Aún no ha vuelto a la habitación, y mi mente no logra imaginarse a dónde fue. Irónicamente la opción que más me tranquiliza ahora sería que él haya pasado la noche en el castillo con Amber, aunque fuera en la misma maldita cama, todo sería mejor que imaginar a mi amigo tirado por ahí, desmayado con otra sobredosis, pero ese es el peor escenario y dudo que sea real.

Abro el mismo cajón de donde él sacó las pastillas ayer, y noto que en el fondo hay cajas y botes de distintas drogas que se supone que no tendría que tener ahora, pero me detengo antes de tirarlas, eso sería ir demasiado lejos en mi opinión.

Mi idea ahora es buscar a Alan para asegurar que esté bien, a pesar de tener la primer clase en un rato, eso puede esperar hasta después de que me lo cruce.