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Capítulo por el cumpleaños de lucianagarrertt  , quien es una de mis lectoras de hace más tiempo, y que más cariño le tengo desde hace muchos años. Cada vez que veo una interacción tuya en mi novela, me lleva de vuelta a cuando comencé a escribir, y al reducido apoyo que tenía comparado con ahora, pero tú estabas ahí. Estoy por siempre agradecida, te quiero muchísimo, disfruta tu regalo. <3

¿Y tú lo perdonaste tan fácil? 👑

26 de septiembre de 1998...

~Narra Amber~

La mañana es buena gracias a que espero la llegada de Leo.

Ya me he vestido, desayunado y almorzado para cuando recibo las noticias de que está abajo. Esta vez William lo sabe así que no es un secreto ni mucho menos, pero sería mejor que Charles no se entere y ni siquiera algún trabajador del palacio que le pueda contar.

Me lo encuentro en una de las áreas de recepción, con una sonrisa divertida y los brazos abiertos. Brazos a los que corro para que me contenga entre ellos, y me fascina cómo me levanta un poco de mis pies al hacerlo, riendo mientras tanto. William ha hecho eso mismo alguna vez, hace meses, y recuerdo sentirme muy amada en esos momentos.

- Alteza, qué bueno verte - Dice alteza como una broma cuando finalmente termina nuestro abrazo. 

Yo solo sonrío con las mejillas enrojecidas, porque Leo no deja de ser un actor de Hollywood súper apuesto que está feliz de verme, es como un sueño.

- Vayamos a mi habitación - Le hago una seña para que me siga y vamos arriba. 

En el cuarto me tomo el tiempo de observarlo bien, usa un suéter gris, con una puffer jacket por encima, jeans sueltos y zapatillas. Yo por mi parte uso un suéter rosa de lana con shorts blancos. 

- ¿No te mueres de frío? - Se frota las manos antes de sacarse su chaqueta y dejarla sobre mi cama. 

Río por su cara de desaprobación viéndome de arriba a abajo. - Supongo que estoy acostumbrada - Confieso, y esa es mi única teoría ya que él no se nota contento por el clima. 

- Debe ser deprimente vivir en una ciudad tan fría y lluviosa, es como Nueva York - No conozco el clima de ahí, pero si él dice que se parece, le creo.

- No siento que sea deprimente, a mí no me molesta - Digo tímida por estar en desacuerdo y miro por la ventana el cielo gris y la niebla.

Para cuando me giro él está sentado en mi cama, cuando lo veo abre los brazos como esperando que le de algo, nerviosa intento descifrarlo.

- ¿Mi vuelo aterrizó hace tres horas y no me recibes con comida? ¿A qué clase de palacio vine? - Mira a su alrededor con el ceño fruncido, haciéndome reír pero me preocupa su queja.

Tiene razón, lo correcto cuando recibes a alguien en casa es tener algo de comida para ofrecerle a esa persona. Pero esto ni siquiera es una casa, no es mi casa, ¿Y qué se supone que debo hacer? ¿Pedir que me traigan algo de comer o ir a la cocina y buscarlo yo misma?

- ¿Quieres té? - Pregunto rápidamente. 

- ¿Tienes café? - Dice sentándose más cómodo en mi cama. - Es decir, obviamente hay café, es un palacio, seria decepcionante que no hubiera - Se hace reír a sí mismo. 

- Ok, te traeré café y galletitas, ¿Si? - Eso es lo más normal aquí, y supongo que es lo que quiere. 

- ¿Tienes papas fritas? - Pregunta con expresión de niño que no para de pedir cosas a sus padres. 

Princess  // Familia Real BritánicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora