Princess // Familia Real Británica

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esa alianza es eterna 👑

4 de marzo de 1999...

~Narra William~

Amber y yo estamos en un hospital de los que mi madre apoyaba en vida. Es una visita oficial en la que hay cámaras y me aseguro de sacar el mejor lado de mí, de verme feliz y unido a mi joven esposa. Saludamos a todos los que trabajan aquí, lo típico, y luego somos guiados por una mujer a través de las habitaciones donde nos paramos a escuchar a cada uno, sus historias de cómo llegaron aquí, pero este hombre que tenemos en frente parece tener otro tema de charla.

- Me acuerdo mucho de tu madre - Me dice con lágrimas en los ojos, las mismas que yo intento evitar al escuchar hablar de ella. - La ultima vez que vino aquí fue en julio del noventa y siete. Tenía tanta alegría, tantos planes para el futuro, que nadie se esperaba que le pasara algo tan terrible - Me lo cuenta como si no estuviera hablando con su hijo. Toma mi mano sin permiso y sin previo aviso, yo estoy sentado en el borde de su cama de hospital mientras que Amber está de pie, se la nota algo incómoda cuando la atención no está sobre ella la verdad.

Pero fuera de que odio escucharlo decir esas cosas y desearía que pasemos al siguiente paciente, tiene mucha razón en lo que dice. Mi madre estuvo llena de vida hasta el último día. 

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17 de agosto de 1997...

Un avión privado nos trajo a Harry y a mí a la costa de Francia junto con dos hombres de seguridad. Estos días los pasaremos con mamá, aunque ya se lo que eso implica y preferiría quedarme en casa.

La vida con mi madre es caótica, ella no tiene la misma seguridad que papá y tampoco parece quererla. Ella a veces busca la atención de la prensa, cosa que odio, y no puede darme lo que yo busco en todo momento que es paz. Mamá no puede asegurarse de que no vendrán fotógrafos a acosarnos, y como todos la buscan, siempre termino en los periódicos cuando me toca estar con ella. Con papá eso no pasa, puedo pasearme libre por la inmensidad de Balmoral, puedo disfrutar de un rato a solas con él sin tener todas las cámaras del mundo apuntándonos, y eso me tiene esencialmente más feliz. Con mamá, aunque la amo y es divertido el tiempo que pasamos juntos, en el fondo siempre estoy consciente de que por algún lado saldrá un hombre apuntándonos con un lente gigante y convertirá un momento privado en familia en algo público. Hace lo que puede, pero el tiempo que debo pasar con ella por el acuerdo que hicieron, es más un estrés añadido que un recreo de mis responsabilidades reales. 

Bajamos del coche en el puerto, y nos acercamos al yate que nos indican, lo primero que vemos al subir es a mamá, usando un traje de baño azul con unos shorts rosas que no combinan, con su cabello desordenado y lentes de sol sobre su cabeza. Tiene los brazos cruzados, sonriente mientras nos ve caminar hacia ella, y cuando la tenemos en frente los abre para recibirnos con un abrazo, a mí primero como es costumbre.

- Mi Wills - Es un abrazo corto, y al separarnos me mira con ternura y aparta el cabello que ha caído sobre mi rostro por el viento. 

- ¿Cómo estás, mami? - Pregunto.

- ¡Ahora estoy muy bien! - Exclama contenta mientras se agacha un poquito para envolver a Harry entre sus brazos, él se deja más tiempo. 

Atrás de mamá esta el hombre del que he leído en la prensa, el nuevo novio de mi madre, este tal Dodi, un millonario.

Extiendo mi mano para saludarlo en lo que escucho a los asistentes subir nuestras cosas a mi lado. - Hola, soy William es un placer -

- William, por favor - Dice como si fuéramos amigos de toda la vida, con una sonrisa confiada y rechaza mi mano, abriendo sus brazos para un abrazo. Yo acepto con una sonrisa a pesar de que me parece muy pronto para esto. - El placer es mío, tu madre no hace más que hablarme maravillas de ti - Por suerte nos separamos pronto.