comedia | relaciones chico x chico | alteración de la realidad | escenarios muy rosas | soft | flu
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—Phu, tengamos una cita— propuso Pond de repente.
Ambos estaban intentando ver las estrellas en la azotea del lugar donde vivía el menor.
Sólo eran ellos dos en la privacidad de su hogar, parados uno junto al otro y tomando levemente la mano ajena solo con el dedo meñique.
—¿Una cita?— cuestiona Phuwin sin mirar a Pond —¿Sabes que es casi imposible ver un cielo limpio, lleno de estrellas en Bangkok?
Confundido por la forma en que el menor desvía el tema, Pond le voltea a mirar.
—Me refiero, cuando ves el cielo, lo único que puedes ver es un cielo obscuro que parece estar iluminado por las luces de abajo.
Phuwin mira a Pond, este hace un ademán en relación a qué le escucha.
—Pero necesito que vengas conmigo.
El menor termina de unir sus manos entrelazandolas y finaliza con un suave apretón.
Sin embargo, Naravit no sabe cómo reaccionar, ¿Realmente Phuwin había ignorado su sugerencia?
—Phuwin.
—Sólo ven conmigo.
Phuwin jalo un poco la mano de Pond, y como este seguía sin responder, solo pudo acariciar levemente la palma ajena.
También sonríe con amor hacía el mayor.
Al final, Pond terminó siguiendo a Phuwin hasta el auto, aún se sentía aturdido, pero confío en el menor.
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Habían estado buen tiempo en carretera, Pond seguía sin saber que sucedía y cada vez se alejaban aún más de la cuidad.
Phuwin no hablaba, solo se mantenía enfocado en la autopista.
—Phuwin…
El menor no le miro, solo estiró una de sus manos, mano que Pond miro dudoso antes de tomarla suavemente y entrelazar sus dedos.
Entonces toda las dudas de Pond se fueron por un momento cuando vió a Phuwin manejar a una sola mano.
Las personas que conducían de esa forma eran tan sexys.
Mientras pensaba eso, el auto se estacionó cerca de un mirador, y aún en ese momento, Pond no sabía que sucedía.
—Ven— volvió a decir Phuwin.
El lugar estaba completamente vacío, solo estaban ellos y eso era sumamente íntimo.
—Te dije que es imposible ver estrellas en Bangkok, ¿Cierto?— Pond asiente confundido —Eso se debe a la cantidad de luces que hay en la cuidad.
Phuwin no miraba a Pond mientras decía todo eso, en su lugar, veía a la cuidad a sus pies.
El mirador estaba en una lugar boscoso y alto pero bien cuidado, después de todo, muchas personas iban a ese lugar a disfrutar de la naturaleza y el silencio que ofrecía lejos del revuelo de la cuidad.
—Pero si miras la cuidad desde un lugar alto, puedes ver las estrellas— explico Phuwin, está vez, viéndole con cariño, sus manos aún entrelazadas —¿Lo ves? Todo ese mar de luces se asemeja a las estrellas.
Pond mira a la cuidad, en realidad es una vista muy hermosa, hay luces por todos lados, se ve tan brillante que causa una especie de sentimiento calientito en su pecho.
—Aunque si miras al cielo, podrás ver el mar de estrellas que la cuidad no te deja ver— Pond lleva su mirada hasta el cielo, era tan increíble ver tantas estrellas —En realidad este es mi lugar favorito, solo traigo aquí a personas especiales.
Y Naravit se sintió aún mejor cuando Phuwin dijo eso.
—Pond, tengamos nuestra cita aquí— dice el menor viéndole directamente a los ojos —No importa si vemos las estrellas en el suelo, o en el cielo… porque yo prefiero ver las estrellas de tu mirada.
Luego de eso, Phuwin tomo suavemente el rostro del mayor con la mano libre, acaricio un poco mientras le miraba con cariño y adoración.
Phuwin se acercó hasta el rostro del mayor y le besó con delicadeza, moviendo sus labios de manera lenta, pues no tenía prisa, solo quería transmitir con ese simple toque todos los sentimientos que tenía guardados en su interior.
No le importaba nada, solo quería besar a esa persona que siempre lograba poner su mundo de cabeza.
