La luz de las farolas y antorchas entró precariamente por las ventanas, iluminando en tonos suaves la habitación del diamante. Skeppy yacía dormido, soltando palabras al azar entre sueños y removiéndose cada tanto. Su cabello oscuro estaba revuelto, lleno de pequeños nudos, y las gemas que emergían de su piel oscura se enganchaban cada tanto con sus sábanas, pero no era lo suficientemente grave como para que fuese molesto. O quizás ya estaba acostumbrado a la sensación. A saber.
Skeppy aún vivía con sus padres y su hermana en el lugar donde surgió. En su «pueblo natal», si es que la mera definición de ello encajaba en su caso.
La gente gema solía vivir en cuevas gigantes dentro de montañas. Las «montañas huecas» normalmente hervían de vida, llenas tanto de la misma gente gema como de aquellos visitantes que solían ir allí para adquirir recursos que no estaban disponibles en otros sitios o que eran difíciles de conseguir en la superficie.
Skeppy y su familia, al ser diamantes, vivían muy en el fondo de la montaña, muy por debajo de la altura donde la luz del sol natural podía colarse por entre las grietas. Sin embargo, estaban siempre iluminados por las antorchas que plagaban cada recoveco de ese gigantesco sitio. Se suponía que funcionaban con algún tipo de roca rojiza, además del carbón, que las mantenía siempre ardiendo, pero Skeppy no sabía ni su nombre ni su utilidad verdadera. Por mucho tiempo creyó que era redstone, pero resultó ser que no. Igualmente, tampoco era muy importante.
Poco a poco, la respiración del chico durmiente se fue acompasando hasta que comenzó a salir de sus sueños.
En el momento en que la gema estuvo algo despierta y consciente, escuchó una voz bastante dulce cantar alguna canción que no comprendía. La voz le estaba arruyando tan bien que empezó a sumirse en la bruma del sueño nuevamente, poco a poco.
Cuando estaba a punto de quedarse dormido de nuevo, su mente se disparó.
«¡¿Eh?!» fue el único pensamiento coherente que pudo formular por unos minutos. La voz en su cabeza detuvo su canto indescifrable por unos segundos antes de continuar. ¿Una voz en su cabeza? ¡¿Podía ser que… No, un segundo. Skeppy no entendía nada de lo que estaba diciendo esa voz. Nada. Literalmente. Todas las palabras estaban en… ¿eh? ¿Lo que estaba escuchando siquiera era chino?
«¿Qué idioma es este? ¿En qué idioma está cantando? ¿Todavía estoy dormido?»
Su mente se disparó. Como consecuencia, el canto volvió a detenerse.
«¡No, no, espera, no dejes de cantar!»
Pero la voz cantarina no regresó. En cambio, un pensamiento por demás extraño cruzó su cerebro.
«ᑑ⚍ᒷ ᒲ⚍⎓⎓╎リᓭ ⍑ᔑ ᓭ╎↸𝙹 ᒷᓭ𝙹? ᔑꖎ⊣⚍╎ᒷリ ᒲᒷ ᒷᓭℸ ̣ ᔑ ᓵᔑ⨅ᔑリ↸𝙹?»
Ah.
La mente del híbrido de diamante se quedó en blanco por un largo minuto. ¿Qué estaba diciendo? ¿Qué se suponía que significaba eso? ¿Qué era ese idioma? No entendía nada. El acento no le sonaba. Las palabras vagaron por su mente un buen rato, tratando de descubrir la más mínima similitud de ese lenguaje extraño con su propio lenguaje. No había ni una sola.
«¡¿Qué es ese idioma?! ¡¿Me estás jugando una broma?!»
«ᑑ⚍╎ᒷリ ⊣∷╎ℸ ̣ ᔑ?!»
«¡¿Qué dices?! ¡¿Qué estás diciendo?!»
La respuesta no le llegó en sus pensamientos.
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Mente en blanco [Skephalo]
FanfictionEn un mundo donde puedes escuchar los pensamientos de tu alma gemela cuando cumples los 18 años a excepción de su nombre y su ubicación, Skeppy está emocionado por escuchar la voz de su otra mitad. Sin embargo, cuando la fecha llega... las cosas no...