✤07✤𝑪𝒐𝒏𝒇𝒆𝒔𝒊𝒐́𝒏 𝒑𝒐𝒓 𝒄𝒐𝒏𝒇𝒆𝒔𝒊𝒐́𝒏

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𝘼𝙞𝙩𝙖𝙣𝙖
-Me gustan tus ojos. -dije sorpresivamente de forma tan natural.
Mis mejillas enrojecieron tanto ante lo que había dicho que pude sentirlo, era cierto que yo podía ser muy fácil de enrojecer pero dependía mucho de la circunstancia o la persona. Esta vez fue de vergüenza, de una vergüenza enorme por no saber si lo que había dicho haría sentir incómodo a 𝗗𝗮𝗿𝗶𝗲𝗹. Me aleje lentamente de el, hasta la distancia que estábamos anteriormente, estaba demasiado nerviosa así que ya no dije nada, intenté desviar mi mirada pero no pude así que continúe mirándolo.
El silencio nos inundó por unos minutos hasta que él lo rompió diciendo mirándome a los ojos.

-Me atraes.

Me asombre muchísimo y entre en pánico y lo supe porque mis manos ya estaban extremadamente heladas, y eso solo pasaba cuando estaba muy nerviosa. No pude decir nada así que solo me quedé mirándolo y el aún no apartaba su mirada de mí como esperando una respuesta por mi parte pero no llegó.
Nuestras miradas se entrelazaban llegando a mostrar lo que nuestros corazones ocultaban en ese momento.
Poco después me atreví a hablar pero no podía mencionar nada sobre aquello que había dicho así que mi única salida fue huir en ese momento.
-Amm.. Me tengo que ir. -dije levantandome de aquella banca en la que nos encontrábamos sentados.
-Esta bien, igual tengo unas cosas que hacer, te vas con cuidado.
-Nos vemos después. -me límite a decir yendome de aquel lugar.
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Camine lentamente hacia mi casa, estaba bastante cerca del parque donde estábamos así que no debía preocuparme y tampoco quería llegar tan deprisa. Necesitaba procesar todo lo que había sucedido con 𝗗𝗮𝗿𝗶𝗲𝗹 habían sido confesiones bastante inesperadas para un solo rato y para mí pequeño corazóncito que se exaltó ante todo eso.

Llegué a casa y mamá se encontraba en su cuarto recostada. Entre a saludarla y me dijo que si quería cenar había leche y cereal, eran a penas las 6:30 de la tarde y igual yo no era de cenar casi. Así que solo le respondí que no tenía hambre.
Entre a mi cuarto y cerré la puerta.
Amaba mi privacidad y no me gustaba que fuera interrumpida así que prefería cerrar siempre, conecté mi celular a una pequeña bocina Bluetooth que tenía.
Puse en aleatorio la música y me recosté en la cama suspirando de alivio, por alguna razón me sentía agitada, quizá habían sido las emociones y el nerviosismo ante lo que pasó.
Miraba el techo con miles de pensamientos, principalmente sobre el por qué había huido de esa forma. Quizá había hecho sentir mal a 𝗗𝗮𝗿𝗶𝗲𝗹 y la posibilidad de ello realmente me atormentaba.
Mientras me hundía en mis pensamientos comenzó a sonar
𝗟𝗼𝘃𝗲 de 𝒁𝒐𝒆 pero en la versión que había hecho 𝑴𝒐𝒏 𝑳𝒂𝒇𝒆𝒓𝒕𝒆 era algo verdaderamente mágico. Una canción de mi banda favorita en la voz de mi cantante favorita en el mundo. Eso me relajó completamente y comenzé a cantar en voz baja
-𝐸𝑛 𝑡𝑢 𝑝𝑙𝑎𝑛𝑒𝑡𝑎 𝑚𝑒 𝑞𝑢𝑒𝑑𝑒́ 𝑓𝑢𝑒 𝑝𝑜𝑟 𝑢𝑛 𝑡𝑖𝑒𝑚𝑝𝑜 𝑦 𝑛𝑢𝑛𝑐𝑎 𝑓𝑢𝑒 𝑚𝑖 𝑝𝑙𝑎𝑛, 𝑝𝑒𝑟𝑜 𝑚𝑖 𝑛𝑎𝑣𝑒 𝑠𝑒 𝑎𝑣𝑒𝑟𝑖𝑜́
𝑌 𝑎𝒉𝑜𝑟𝑎 𝑒𝑠𝑡𝑜𝑦 𝑝𝑒𝑟𝑑𝑖𝑑𝑜 𝑎𝑞𝑢𝑖́ 𝑒𝑛 𝑚𝑎𝑛̃𝑎𝑛𝑎𝑠 𝑐𝑜𝑛 𝑡𝑟𝑒𝑠 𝑠𝑜𝑙𝑒𝑠 𝑦 𝑚𝑢́𝑙𝑡𝑖𝑝𝑙𝑒𝑠 𝑣𝑖𝑠𝑖𝑜𝑛𝑒𝑠 𝑚𝑜𝑛𝑡𝑎𝑛̃𝑎𝑠 𝑡𝑟𝑎𝑛𝑠𝑝𝑎𝑟𝑒𝑛𝑡𝑒𝑠 𝑎𝑛𝑒́𝑚𝑜𝑛𝑎𝑠 𝑑𝑒 𝑙𝑢𝑧 𝑝𝑎𝑟𝑡𝑖́𝑐𝑢𝑙𝑎𝑠 𝑑𝑒 𝑎𝑚𝑜𝑟 𝑦 𝑟𝑒𝑐𝑢𝑒𝑟𝑑𝑜𝑠 𝑑𝑒 𝑡𝑖..
Y vino a mi mente y de nuevo el por qué me fuí sin poder decir más y dolía que en el fondo sabía la respuesta y era que no esperaba atraerle ¿Por qué le atraía yo? esa pregunta corría por mi mente desde el momento que lo escuché decirlo y que no podía sacar de mi cabeza por esas malditas inseguridades que siempre lo arruinaban todo, porque así era yo.
𝗔𝗶𝘁𝗮𝗻𝗮 𝗗𝗲𝗻𝗲𝗯 𝗚𝗿𝗮𝗳𝗳𝗲 la chica de 16 años que a veces se amaba a si misma pero la mayoría de las veces no, que odiaba su cuerpo y en especial sus brazos y por eso prefería siempre ponerse blusas de manga larga para ocultar lo ancho y robusto de ellos. Que consideraba atractiva solamente su cara y también no gustandole algunas facciones de está. Pero era mucho mejor que su cuerpo, que se consideraba inteligente pero no tanto como otras personas, que soportaba comparaciones a menudo, burlas e insultos por su aspecto físico. Que a veces pensaba que no haría nada de su vida por miles de impedimentos que tenía. Que no se consideraba tan interesante y que no creía que alguien se pudiese fijar tan rápido en ella y que la pudiese querer tal y como era. Con todos los defectos e impedimentos que ella sentía que tenía.
Y sí, todas esas inseguridades la mayoría eran creadas por su "familia" desde que era solo una niña. Y familia entré comillas porque solo a pocas personas consideraba parte de ella y sentía tener un lazo afectuoso. Había mejorado muchísimo con esas inseguridades pero aún costaba amarme por completo.

Por eso decidí irme porque no sabía que reacción tener ante ello, había causado una emoción en mi y eso estaba más que claro, pero no podía responderle que a mí también me atraía porque tenía miedo, porque todo fue tan repentino en ese momento fue tan directo que me sorprendió pero ame la sola idea de atraerle a ese chico de ojos marrones tan lindos con ese destello tan peculiar que había un ellos y que me hacía feliz poder pensar que quizás yo algún día podía ser la razón de ese destello.

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Al poco rato y como si lo hubiese llamado con la menté me llegó un mensaje, ya me estaba quedando dormida pero el sonido de notificación que salió de la bocina debido a que no desconecte el bluetooth me despertó.
Era un mensaje de él

𝗗𝗮𝗿𝗶𝗲𝗹:
Disculpa si te incomode con lo que dije, que tengas linda noche.

Sonreí y me sentí culpable por un momento por haberme ido de esa forma y dejarlo.

Me volvió a llegar otro mensaje de él pero lo que decía me sorprendió aún más

𝗗𝗮𝗿𝗶𝗲𝗹:
Te quiero

Aquello me sorprendió aún más, pues no me lo hubiese imaginado por nada del mundo, algo dentro de mí se me movió, era la primera vez que lo decía. El fue el primero que lo hizo, en unas semanas en un tiempo increíble él logro quererme. Y eso fue lo más bonito, eso me hizo estremecer, y leí más de dos veces ese mensaje mientras sonreía como una tonta porque aquello había causado algo dentro de mí
Ese texto
Ese 𝗧𝗲 𝗾𝘂𝗶𝗲𝗿𝗼 fue señal que sería una de las primeras veces que me haría sentir así.

𝒞ℴ𝓂ℴ 𝓊𝓃𝒶 ℯ𝓈𝓉𝓇ℯ𝓁𝓁𝒶 𝒻𝓊ℊ𝒶𝓏Donde viven las historias. Descúbrelo ahora