ᴥCapitulo 17ᴥ

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Xiao Zhan era de esas personas que se volvían más irritables entre menos satisfechas estuvieran, Wang Yibo estaba en muy mal estado y Xiao Zhan estaba molesto e irritado, por lo que sus movimientos eran más rudos que antes. Solo le importaba su propio placer y no si Wang Yibo podía soportarlo.

Wang Yibo estaba presionado debajo de Xiao Zhan constantemente, solamente se escuchan crujidos en la habitación y el jadeo de Xiao Zhan. Wang Yibo temblaba mientras el hombre ardiente subía y bajaba.

"Date la vuelta y mira a este rey"

Xiao Zhan cambio de postura, pero no sentío ningún placer con sus movimientos, le gustan tener a Wang Yibo frente a el mirándolo, de modo que las ondas en la ojos de Wang Yibo y el rubor de su rostro cayeran justo en su vista y le diera una mayor sensación de placer, pero hoy, los ojos de Wang Yibo estaban vacíos, su respiración era débil, su cara estaba prácticamente blanca y se podían ver claramente las venas a través de su piel.

Xiao Zhan se movió más rápidamente, confiaba en su propio poder y la reacción de Wang Yibo lo frustraba.

"UH...."

Hubo un sonido débil en la garganta de Wang Yibo, Xiao Zhan levanto la cabeza y el delicado nudo de la garganta de Wang Yibo latió, luego vio un delgado hilo de sangre resbalar de la comisura de su boca.

Los ojos de Wang Yibo estaban desenfocados, Xiao Zhan olió la sangre y vio como se desmayaba.

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El médico Bian XIV era parte de la corte de la princesa Dairou. Cuando la princesa se casó con el Rey de Zhen Bei, todas la personas del palacio estaban en peligro y tenía miedo de ser enviados a las cruelmente frías regiones del norte. Sin embargo, Bian XIV cedió y se ofreció a seguirlo voluntariamente.

°°°°°°°°

El palacio del Rey mando a una persona en busca del médico, diciendo que el rey estaba en confinamiento con una persona que estaba medio muerta y a la que le quedaba solo un respiro, suplicándole al médico que salvará a esa persona.

"¿Que? ¿Una muerta más?"

Bian XIV se burló e instruyó a su ayudante que pusiera una caja de medicina en la carreta.

No era raro que la gente muriera en la residencia del rey, Bian XIV estaba acostumbrado a eso y no era la primera vez que había sido llamado con urgencia para aplicar tratamiento médico.

Dentro de la residencia Shaohua, Xiao Zhan estaba parado al lado de la cama y Wang Yibo estaba recostado como si fuera una estatua.

"¿Eh? ¿Que hace el rey aquí? El rey realmente está siendo una persona cariñosa y se está haciendo cargo de ella en persona."

El muchacho entro en la habitación con mucho cuidado, no parecía un médico en lo absoluto. Era joven, como de veinticuatro años y lucia como un pequeño niño que no había estudiado medicina.

Solamente había unas cuantas personas que se atrevía a hablarle al rey de esa manera, menos de catorce personas en toda la región del norte.

Xiao Zhan ignoro su cinismo.

"Sálvalo primero." Xiao Zhan dijo de manera concisa.

"Tonterías, recorro miles de kilómetros para salvar a la gente, ¿no te vas a retirar a tus habitaciones?"

Bian XIV puso los ojos en blanco con arrogancia, estiró su mano delgada y la puso en la muñeca de Wang Yibo.

"Bueno, realmente es una pequeña belleza, nunca había visto una persona tan delicada en el palacio, como una muñeca. No es de extrañar que lo aprecies tanto."

Xiao Zhan pestañeo y no pudo evitar tocar la mano de Wang Yibo, se preguntaba cómo podía tener tanta belleza, pero no podía levantarse de la cama.

"No lo toques". Grito solemnemente Xiao Zhan.

Bian XIV puso mala cara, pero aún así se quedó rígido.

"Eh, mira a tu tesoro, si no lo toco, ¿Cómo puedo examinarlo?"

No era de extrañar que Xiao Zhan estuviera tan preocupado, no podía soportar su ctitud asfixiante. Anteriormente, los hombres y las mujeres que se habian desmayado eran arrojados de la cama por Xiao Zhan y, aunque eran rescatados, prácticamente destruía el interés de Xiao Zhan por ellos, cayendo completamente en desgracia y nunca volvía a verlos. 

●El Amante Mudo● ~ZhanYi~ Parte 1.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora