╰ 𝐗𝐈𝐈 ╮¿𝐐𝐮𝐢𝐞́𝐧 𝐞𝐬 𝐞𝐥 𝐞𝐧𝐞𝐦𝐢𝐠𝐨?

297 24 0
                                    

Los soldados del cuerpo de exploración estaban reunidos, observando a los dos titanes de prueba largando vapor al cielo celeste. Muchos no entendían del todo por qué era tan malo que estos seres estuviesen muertos; y otros, el entrenamiento le hizo cambiar su forma de pensar, ellos eran los que murmuraban con los demás sospechando de la situación.

Evelyn, Mike y sus escuadrones estuvieron toda la noche buscando por los bosques al asesino de aquellos monstruos. Ella estaba irritada, asumiendo el hecho de que dos miembros de su equipo la hayan desobedecido de una manera tan descarada. Sus castigos no iban a ser para nada amables, y esto serviría para los hermanos Rousseau para imponer más miedo y respeto.

Como era de esperarse, no encontraron nada. Salieron casi inmediatamente por órdenes de Erwin, fue lo primero que dijo al recibir la noticia. Para su mala suerte, Mike era caracterizado por tener el sueño bastante pesado, por lo que Loukas tardó en despertarlo. El comandante lo ordenó sin pensar en lo agotador que podría ser la pequeña misión improvisada, pero luego lo alivió pensar en que podría tomarse como un castigo. Aunque, por supuesto, eso no evitaría las investigaciones que haría a los soldados responsables. Decidió que no tomaría tanta importancia a estas muertes, ya que se trataba sobre titanes. Otras cosas estaban llegando a su mente.

Un grito los distrajo, sobresaltando a la mayoría. Hange había llegado y eso significaba que Levi y su escuadrón junto a Eren también. Ambos, al ver al comandante, se posicionaron a su lado para ver a la castaña acercarse a sus sujetos de prueba, soltando lágrimas y gritos desgarradores como si la Policía Militar la estuviera torturando por información. Agarraba su cabeza, desesperada por la pérdida y desilusión de descubrir más.

─── ¡No! ───alargó la palabra exageradamente─── ¡Sawney! ¡Bean! ¡No es cierto! ───cayó de rodillas bruscamente, ignorando el ardor que sintió en ellas─── ¡Díganme que es mentira!

Otra distracción apareció para todos excepto la sargento. Los Capitanes Jaeger y Zacharius habían llegado con decepcionantes noticias. Mientras ambos escuadrones bajaban, mirando extrañados la escena de la fanática por los titanes, Ev y Mike se acercaron a Erwin bajo las miradas de Eren y Levi.

─── No tuvo resultado, Erwin ───informó el rubio, serio───. Estuvimos toda la noche buscando y ni siquiera encontramos pistas.

Al ver los ojos de los capitanes, todos probaron que era cierto. Las ojeras eran impresionantemente notables, en especial en ella. No solo por su piel pálida, sino por su angustia que no la dejaba descansar desde antes. Observó a Eren, sin querer saludarlo debido al inquietante momento. Se veía normal y perdido, probablemente no entendía demasiado de por qué los soldados lucían tan perplejos, según ella. Luego conectó sus ojos con los del comandante. Se veía reservado, y al ser correspondida por el contacto visual, supo que estaba reflexionando. En ese mismo instante, ambos estaban pensando en lo mismo, y se lo comunicaron con sus azulados ojos.

─── Tenemos que hablar.

Sus voces sonaron al unísono, sorprendiendo a ellos y a los demás por su conexión. No obstante, sus expresiones seguían sin demostrar absolutamente nada. No soltaron otra palabra más, sus atenciones no tardaron mucho en ser capturadas por la voz de su compañera. Evelyn y Mike se posicionaron al lado de Erwin, viendo la escena que desde el punto de vista de la capitana, era una escena que le causaba mucha pena. Entendía el amor que Hange tenía por la ciencia, pero no tenía intención de entender el cariño hacia los titanes. Ella los detestaba.

El escuadrón de Ev se había quedado atrás al entrar, lejos de la mayoría de la multitud. Tenían su atención en la sargento, dos de ellos sintiéndose un poco avergonzados por ser tan descuidados. Estaban al lado del escuadrón de Levi. Todos observando las lágrimas derramarse en el suelo, mezclándose con el humo. Por la mente de Gunther, algo le molestaba simultáneamente que veía a la castaña soldado, todavía derramando lágrimas. La sospecha y el no entender lo que estaba pasando, lo obligaba a analizar de más.

𝐋𝐄𝐆𝐄𝐍𝐃𝐒  |  𝕷𝖊𝖛𝖎 𝕬𝖈𝖐𝖊𝖗𝖒𝖆𝖓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora