Truth

Como en las películas

Pensé que iba a llover, como en las películas, donde en el momento triste llueve. Pero era una noche hermosa cuando me fui del departamento de John.
Primero me paré enfrente del edificio, en la salida. Yo, clavada ahí, con una gran valija.
Pensé que debía volver. No, no me dejaría entrar.
¿Adonde voy? No tengo a nadie.
La idea llegó rápido: un viejo y barato hotel.
Encontré uno lejos de mi trabajo cerca de una carretera, todo sucio y apestoso.
Renté un cuarto y me dispuse a limpiar. Cuando termine, caí acabada en mi cama mientras las preguntas me zumbaban.
¿Edward tenía un secreto? ¿Por qué no me lo contó?
Me decidí que mañana después del trabajo lo buscaría. No importara lo que el estúpido de John dijese.
Al día siguiente, luego de irme del bar, tomé el metro a lo de Edward.
Cuando llegué, toqué la puerta esperándolo.
Me abrió pero al instante me cerró la puerta.
-¡Ed no te escondas más! John no sabe que estas aquí.
Pero no respondió.
-Edward... Estoy sola.-dije mientras me deslizaba por la puerta llorando.
De pronto, abrió.
Me besó fuertemente.
-Te amo, perdón por irme tan bruscamente. Eres lo mejor que me pasó en la vida y espero que pienses lo mismo de mi.-me dijo suavemente.
-Ed...
-Sé que quieres respuestas.
Tomó mi mano y me llevó al living, donde me sentó para hablarme.
-Todo empezó hace cinco años. Nuestra familia estaba en la miseria, nuestra empresa de vinos había expirado. Y éramos todos unos idiotas: nuestro trabajo era pobreza y vivíamos de la empresa. Así que cada hermano no pudo pagar más su hogar y eventualmente todos nos mudamos a un departamento. La renta del departamento no era pagada y empeze a...a robar. Cosas de todo tipo y a todo tipo de gente. Mi familia no lo sabía, creían que sacaba el dinero del trabajo. Hasta que un día le robé a un anciana en su casa. Le agarró un paro cardíaco del miedo y murió. Me denunciaron y en poco tiempo me vi en cadena perpetua. Para ese entonces nuestra familia se había recuperado del todo, pero no querían pagar mi alta fianza. El único hermano que me salvó fue John, con todos sus ahorros. De ahí en mas le debo dinero, o eso creo yo.
-Uau, Edward, no sabía. ¿Por qué no me dijiste?
-Te amo demasiado como para que me dejes.
Y cómo no besarlo. Imposible.
Al caer la noche, le dije que tenía que volver pero propuso que me quede con él.
-Ed, si John se entera te matará y no quiero eso. Descuida,está bien, puedo cuidarme sola en ese hotel.
Y mientras esperaba al metro, vomité todo lo que pude porque al parecer estaba muy enferma. O eso creía.
Las semanas siguientes no fueron diferentes:poco a poco me acostumbré al hotel y cada día después del trabajo me iba a lo de Edward. Los fin de semanas también me la pasaba en lo de Ed, era muy divertido. Sabía que si John nos descubría lo pondría a Ed en deudas pero sería mucho peor que yo me quedara a vivir en su casa, como él me propuso.
Los Lunes iba a lo de John para que el inspector revisará el departamento. Era un silencio total entre nosotros. Él parecía muy solo.
Pero todas estas semanas me había sentido muy enferma, vomitando y sufriendo.
Hasta que no me llegó el período.
Me hice el test de embarazo y dio positivo.
Estaba embarazada. Y no podía creerlo. Estaba demasiado asustada.
El padre...
Podría ser John o...Ed. Si, el Lunes en el que él me hecho del departamento, Edward y yo...bueno...eso.
Fui rápido con Edward, debía decírselo.
Toqué a su puerta en el medio de la noche y le conté todo rápidamente. El se emocionó y me abrazó fuertemente. Después de quedó tildado y casi desmayado.
Pero al contarle lo del otro posible padre, vio una tristeza enorme en su rostro y me empezó a gritar.
-¡ERES UNA ZORRA! ¡SALES CON DOS HERMANOS! ¡SÉ QUE ES TU ESPOSO PERO NO DEBERÍAS COGERLO SI ME AMAS! ¡Vete! Ya no quiero ver tu cara.-dijo mientras cerraba la puerta en mi cara.
Llorando desesperadamente me fui a un bus y viajé a lo de John, también tenía el derecho a saberlo.
En ese momento empezó a llover, como en las películas.
Llegué a su departamento y luego de que me abriera la puerta se lo dije.
Y pensé que tal vez iba a poder tener un final feliz, como el de las películas.