-¡Vaya! Han cambiado un poco las cosas desde la última vez.- dijo Sibylla mientras miraba por la ventanilla del carruaje.
-¿Qué esperabas? Han pasado dos años.- dijo Fiona. Miro a su marido y este le dio un tierno beso en los labios.
-Madre esta deseosa de verte. Sabes que para ella eres como una hija más.- dijo Warren sonriendo.
-Lo se. Lo se...- susurro Sibylla.
Reconocía que ella también había echado mucho de menos a Caroline. Ella había sido la mejor amiga de su madre, al igual que lo era Katerina de ella. Al pasar tanto tiempo con los Knight, había considerado a todos como su familia. Caroline era la mujer más peculiar que había conocido. Era una mujer de carácter fuerte, le gustaba que todo fuera como ella lo tenia pensado. Tenia un extraño don: ganaba todas las apuestas. Con todo, Caroline y Elisabeth se complementaban. Su madre era divertida, pero Caroline era la que siempre la metía en problemas. Y en ese aspecto, le recordaba a Katerina.
Sonrió al ver Carsley frente a ella, la mansion que tan buenos recuerdos le había dado. Warren ayudo a su esposa, a Hazel, que habia estado dormida parte del trayecto, y a Sibylla a bajar del carruaje. Katerina salio corriendo a su encuentro. Ella y su hermano habían salido temprano de Londres para prepararlo todo para su llegada.
-Sibyl, que bien que estas aquí. Madre te está esperando.- dijo mientras la arrastraba hasta la casa. La llevo directamente a la salita donde la esperaban.- Madre, mira quien ha llegado.
-¡Oh! Sibylla.- y la estrecho entre sus brazos. Luego puso una mano a cada lado de su cara y la miro con ternura.- Hija, estas preciosa. Te he echado mucho de menos. Te pareces tanto a tu madre.
-¿De verdad?- dijo Sibylla con voz quebrada. Estaba luchando por retener las lagrimas, pero una se le había escapado.
-Desde luego tienes los ojos claros y decididos de tu padre, pero el pelo y los labios de tu madre.- a Caroline también se le escapaban las lagrimas. Y al verlas llorar, Katerina se acercó y las abrazo ambas.- Bueno, fuera lloriqueos. James me ha dicho que tenia planeado un baile este fin de semana.
-¿Otro baile?- dijo Warren entrando en la sala. Se acercó a su madre y la beso en la mejilla.
-Hola, hijo. Fiona, estas resplandeciente. ¿Cómo esta mi nietecito?
-Muy juguetón. Lleva todo el camino dando patadas.- dijo mientras se sentaba cerca de su esposo.
-Bueno, es un Knight.- dijo riendose.- ¡Hazel! Querida, estas preciosa y muy alta. Por cierto, ya me han traído el nuevo piano.
-Bien... he practicado mucho, abuela.
Y así transcurrió la tarde. James llevo a las jóvenes de excursión a unas ruinas que estaban cerca de la mansión. Faltaba un mes para Navidad, y ya estaban haciendo planes para dichas fechas. A Sibylla le alegro saber que Jason y su esposa llegarían al día siguiente. Aunque sabia que estaría más feliz si cierto amigo estuviera ahí.
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La indomable Lady Sibylla (Saga por y para siempre #1)
Roman d'amourCuando Lady Sibylla pierde a sus padres en un fatídico accidente, deberá convivir con su cotilla y codiciosa tía. Poseedora de una gran fortuna, muchos se acercarán a ella por dinero y títulos, pero pocos saben de su carácter indomable y libre. Busc...