Elisabeth llegó a la casa de William antes de la hora pautada, si había algo que detestaba era la impuntualidad y en eso, era muy exigente.
Al tocar el timbre abrió una mujer de unos cincuenta años con un vestido negro impecable y rostro impoluto e inexpresivo.
- Mi nombre es Isabelle - comentó Elisabeth intentando esbozar una sonrisa, pero la verdad era que la mujer era intimidante.
- El señor...
- Marianne, mis padres necesitan ayuda con algo en la cocina, deja que yo me encargue de mi novia - comentó William en perfecto francés al aparecer tras la mujer.
Marianne asintió y se retiró, William invitó a pasar a Elisabeth, y la despojó del abrigo que esta llevaba.
- No sabía que hablabas francés - comentó Elisabeth.
- Cariño - respondió William - la familia Dubois es de ascendencia francesa. En esta casa en 90% del tiempo se habla solo francés ¿Conoces el idioma?
Elisabeth asintió.
- Mi padrastro me hizo estudiar Inglés, Francés y Chino Mandarín - esbozó una sonrisa, era la primera vez que comentaba algo de su vida pasada - aparte del español que es mi idioma natal.
- wow - exhaló William - si que eres una caja de sorpresas Fraser.
Ambos rieron y se encaminaron al salón principal de la enorme mansión.
Elisabeth se sentía como una hormiga y por suerte había decidido llevar un vestido medianamente elegante, si no, desentonaría por completo con la elegancia con la que se respiraba en aquella casa.Mientras que Elisabeth llevaba un vestido corte sirena a media pierna en color azul noche, Margaret apareció en el salón con un vestido negro de terciopelo con un drapeado ligero en la cadera pero ceñido al cuerpo hasta el medio muslo desde donde caía gracias a una abertura, perfecto para realzar sus curvas.
Elisabeth estaba sorprendida pues la mujer debía tener unos cuarenta y muchos o cincuenta y pocos, pero, fácilmente podía pasar por una chica de treinta o treinta y cinco años pues se conservaba muy bien.
- Isabelle - se acercó y depositó un beso en cada mejilla de la pelirroja - me complace mucho tenerte aquí esta noche.
Elisabeth esbozó una sonrisa mientras William la tomaba del brazo
- Mi madre ha hecho todo un festín en tu honor - comentó - además ha invitado a varios miembros de nuestra dis tin gui da familia para conocerte - El tono irónico resaltaba en la voz de William - al parecer mi hermosa novia es todo un acontecimiento.
Elisabeth trató de mantenerse inexpresiva, pero fue inevitable y la madre de William lo notó.
- Exageras - soltó poniendo los ojos en blanco - la familia Dubois debe conocer a la futura esposa del heredero.
- ¡Mamá! - William se notaba tenso - Sabes que es muy pronto para hablar de boda...
Elisabeth comenzaba a ponerse nerviosa ya que se notaba que estaba en puertas de una discusión.
- Cariño - murmuró intentando sonreírle al rubio a su lado - Por qué no salimos a tomar aire - miró a la mujer frente a ella - Tiene usted un excelente gusto, su decoración es magnífica.
Margaret sonrió victoriosa y Elisabeth tomó a William del brazo mientras se alejaban.
- Déjala - murmuró mientras salían por la puerta trasera hacia el jardín.
Elisabeth quedó boquiabierta, si la casa se veía maravillosa, el jardín parecía salido de un cuento de hadas. Había luces en los árboles, estatuas, plantas florales de muchos tipos y ni hablar de los caminos que se extendían hasta que no se lograba ver más, además, un pequeño puente en forma de arco que cruzaba un pequeño lago.
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No Tan Culpable ~ 🔞 ~ ( No Tan Inocente II)
RomanceElisabeth se ha marchado y ha dejado todo atrás, su vida, sus amistades y sus viejos amores. Cuando su vida parece tener algo de forma, su pasado parece pisarle los talones cada vez más. Pero ahora tiene otros motivos para luchar. Ya no es la misma...