No soy un maldito Hale, soy Stilinski #STEREK

1.5 Familia Stilinski

"Amado Hijo:

Ser una familia, es algo en lo que tienes que creer antes que hacer, algo en lo que tienes que poner todo tu esfuerzo y corazón para que funcione, respetar al otro y sus deseos y que la mayoría de los deseos, coincidan con los tuyos; se que parece difícil pero no es imposible, solo se necesita amor y trabajo para ello.

La verdad es que no sé por qué Derek siempre se quejó tanto de Stiles cuando estaba en la manada, creo que tu papá era el que le daba el sentido de manada a esos niños cuando los conocí. Por lo que me contaron, ayudó a tu tío Scott a controlarse en su primera transformación, descubrió y ayudó mucho a tu tía Lidya con sus temas de Banshee. Ayudaba a todo el mundo incluso si su vida estaba de por medio, aunque eso muchas veces no bastó, porque le dejaron de lado cuando lo necesitaba y no le creyeron muchas veces que dijo la verdad... Pero eso es otra historia que no me corresponde a mí contar.

Hasta ahora te he dado el contexto de cómo es que sucedieron las cosas para que tu papá y yo llegáramos a vivir juntos, pero ya a estas alturas, a tus 18 años, debes saber que vivir con alguien por un tiempo, no significa que vaya a ser tu familia, así que te estarás preguntando cómo algo temporal pasó a ser permanente y más aún; cómo es que nos transformamos en la familia Stilinski y creo que de todas, esta es la carta más emocional para mí de escribir, incluso si lo pienso, lo de Derek, fue doloroso y pensar en ti, sabiendo todo eso me parte el corazón, pero no me llega a estremecer hasta poner la carne de gallina como lo hace pensar en nuestra pequeña familia, lo más importante para Stiles y para mí. Porque siempre, a cada año que pasábamos juntos, me lo demostró con todo su ser y sinceridad, para él, nosotros éramos lo más importante y dejaría todo por nuestra felicidad, incluso si eso significa no tener jamás un amor romántico...

Ese día comenzó como cualquier otro, la única diferencia es que por la tarde tendría una cita con el doctor y me dijo que con suerte, ya que no había tenido controles muy bien hechos que digamos, sería la indicada para poder ver tu estado y escuchar los latidos de tu corazón, así que obviamente a la primera y única persona que se lo dije fue a Stiles, porque era él quien me acompañaba en todo y estaba ahí para mí, estando al pendiente de nosotros y sentí que ésta sería al fin una bonita noticia que darle; después de todo, estaba teniendo un montón de trabajo extra, adelantando cursos en la academia y haciendo otras tantas cosas que lo mantenían agotado la mayor parte del tiempo, y eso de Stiles, es decir bastante.

Ese día, él había salido temprano a la academia, estaba en su último año ya que como te dije antes, adelantaba todas las asignaturas que podía, y como antes de irme a vivir con él, ya tenía muy buen rendimiento, con lo que estaba haciendo, sería capaz de terminar en un año. Así sumando a las prácticas, ya podría estar establecido como agente de campo, y me dijo que había calculado que eso lo haría posible para cuando nacieras tú.

Como había salido temprano, no pudimos casi hablar por la mañana, más bien, yo estaba con sueño, porque con el embarazo me la pasaba durmiendo, y el solo me despertaba un poco para despedirse y decirme que me llamaría más tarde, después de levantarme y tomar desayuno le envié un mensaje contándole que hoy era la cita con el doctor para ver qué estuvieras bien, no le dije que podríamos escuchar tu corazón, quería guardarlo como una sorpresa, así que solamente le dije que era para ver tu desarrollo, me contestó de inmediato que no se lo perdería por nada del mundo y que nos veríamos en el hospital.

Me pareció un poco raro, porque ese día según el calendario que tenía apuntado en la cocina, tenía clases hasta las 12 y después a las 3 volvía a entrar a las prácticas y otras clases hasta las 10 de la noche, pero como siempre estaba haciendo algo, no le presté tanta atención y nos quedamos de acuerdo a las dos en el hospital porque a esa hora era la ecografía. A eso de la hora de comer, eran las 1:50 y Stiles no llegaba, me estaba comenzando a preocupar porque él era muy puntual para todo lo que tenía que ver contigo, si salía por un antojo mío a la tienda, si decía que en 15 minutos estaba en el departamento, llegaba en 14 minutos, para que veas que así de paranoico ha sido siempre, pero bueno, ya cuando era la hora en punto, me llamó el médico y ví a Stiles corriendo por el pasillo a toda velocidad, la verdad, verlo hicieron que todas las preocupaciones se sacudieran de mis hombros y sin decir nada, solo con saber que estaría allí, estaba segura que todo estaría bien.