No soy un maldito Hale, soy Stilinski #STEREK

2.8 Las noches más frías

-Los he extrañado un montón- Sean comenzó a girar con ambos Stilinski sobre su cuerpo y Stiles luchando por bajar de allí.

Después de unos momentos Sean reparó en la presencia del otro hombre, es que cuando se trataba de Stiles siempre el mundo desaparecía de sus ojos y podía hacer todo por el de lunares, lo ha hecho todo por él y eso mismo es lo que le da miedo, que Stiles se entere de todas las cosas que ha hecho; es que desde que conoció al de lunares fue como una cálida luz del sol de verano haya bañado el frío invierno que era su existencia y quería tenerlo a toda costa por eso se esforzaba en ser digno de él.

Derek se aclaró la garganta cuando vio que los ojos del hombre lo escrutaban de arriba abajo -Derek Hale- dijo a la vez que estiraba la mano en son de un saludo.

- Sean Cronwell, director de un área que no me está permitido revelar del FBI- Tomó la mano de Derek y la estrechó en un saludo donde ambos apretaron un poco más fuerte de lo que sería socialmente aceptado

-Sean es mi jefe y como tal en estos momentos debería estar en la oficina y no en Beacon Hill's -Stiles hizo una mueca en dirección a Sean dónde se podía ver su descontento por qué haya abandonado sus responsabilidades y eso hizo que Sean tragase duro.

-Uy! Parece que alguien está en problemas- Se burló Mika con una sonrisa en el rostro

-No me ayudes tanto pequeño- Sean sacó la lengua en dirección a Mika y Stiles los miraba risueño, siempre que ese par estaba juntos se comportaban como niños y eso era de las pocas cosas que le calentaba el corazón.

-Entonces, jefe, qué es lo que piensa hacer en este aburrido pueblo sin su dosis diaria de acción -Stiles tampoco perdía la oportunidad se burlarse de Sean.

-Me encanta cuando los Stilinski se unen para burlarse de un pobre trabajador gubernamental, que ha recorrido cientos de kilómetros solo para estar con ellos, no, no me ofende ni me duele para nada... Pero para contestar a tu pregunta he conseguido un lugar cerca de aquí, la casa que está a la entrada de ese bosque, la he alquilado, no me dijiste cuando iban a volver, solo que tenían que venir aquí por que la condición de nacimiento de Mika se había agravado y su doctor vivía en este pueblo.- Sean negó divertido con la cabeza haciéndose el ofendido.

-Me estás diciendo que hiciste todo el camino hasta aquí, alquilaste una casa, dejaste tu trabajo botado siendo que eres el jefe solo porque Mika estaba enfermo sin saber cuánto tiempo tardaría -Stiles estaba impresionado debía admitirlo, no cualquiera haría lo que Sean estaba haciendo ahora.

-No tienes idea de lo que haría por ustedes- bajo y suave, Derek pudo percibir que incluso era amenazante al pronunciar estas palabras, su lobo le decía que era alguien peligroso y debía mantener un ojo en esa persona, sobre todo por su hijo y también quería cuidar a Stiles, ya era suficiente con que una vez le hayan roto el corazón.

-¿Cuando tendrás lista la casa?- A Mika le alegró la noticia, Sean siempre los cuidaba, a él y a su padre, así que tenerlo cerca le hacía sentir que estaba más aliviado.

-Tengo que ir ahora a firmar los papeles, arreglar unas cuantas cosas que he comprado y ordenar las habitaciones para que puedas ir cuando quieras- Estaba acostumbrado a tener a Mika revoloteando al rededor de su vida y muchas veces se había quedado en su casa, incluso tenía una habitación para él, el chico junto con Stiles eran las únicas personas a las que le permitió entrar y tenía que admitirlo, ese pequeño mono era su niño mimado desde la primera vez que vio sus ojos claros mirarle con un brillo de admiración, era como el hijo que nunca tuvo.

-Bien, no voy a intentar detenerte porque sé que será algo imposible, así que mejor te digo que hagas todo lo que debes hacer y yo me llevaré a este jóven a la cama porque debe descansar, hoy ha tenido otro ataque y tiene que dormir un poco más- Stiles se despidió de un abrazo de Sean quien le acarició el rostro y después le revolvió el pelo a Mika pidiéndole que se cuide y prometiendo volver al otro día.