2.2 Encuentro

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Derek miraba al chico con molestia, le recordaba exactamente la misma situación de muchos años atrás, cuando atrapó a Stiles merodeando por su casa en busca del cuerpo de Laura; el corazón acelerado y el ácido aroma a pánico filtrándose por cada poro, era el mismo de este chico y podía decir, sin lugar a dudad, que incluso olían un tanto similares, aunque hubiese pasado mucho tiempo, podría distinguir el aroma de Stiles entre una multitud. Pero si esa vez era su mente culpable jugándole una mala pasada, después de romperle el corazón a su pareja, jamás volvió a saber de él.

Francamente Derek pensaba que con la personalidad de Stiles, el volvería hecho una furia para reclamarle, le gritaría tres o cuatro cosas a la cara y no se callaría hasta que estuviese cansado y satisfecho con decir todo lo que necesitaba. Pero no fue así, lo que obtuvo en cambio fue un silencio rotundo, casi sepulcral, como si Stiles nunca hubiese existido, cualquier rastro de él ya no estaba, ni en casa de su padre, ni con sus amigos, nada; si no es porque veía al Sheriff a menudo que lo miraba con ganas de asesinarlo, realmente dudaría de su cordura, como si Stiles hubiese Sido producto de su imaginación, porque incluso Scott no hablaba de él.

Mentiría si dijera que no lo espero, que no lo extrañó... Un año completo fue religiosamente todas las noches a casa de Stiles y se quedaba esperando en su ventana para verlo aparecer, pero esto jamás sucedió, lo único que pasó fue lo que le dolió tanto la última noche porque ya no podía olerlo, lo último que quedaba de ese sutil aroma, se fue por completo, le dolió tanto que no pudo volver, no podía regresar a esa ventana que ya no tenía dueño, que era un cuarto vacío en el que se fueron acumulando cajas de casos en los que el Sheriff trabajaba.

Sacudió todos esos pensamientos de su mente y se concentró en el problema que tenía delante, no estaba seguro de que la compasión que estaba mostrando con el niño era porque le recordó a esa persona que tanto lastimó o si era porque su lobo lo reconoció como otro lobo, pero no estaba seguro de dos cosas, una ¿Por qué su lobo lo reconocía con tanta facilidad?, Y segundo ¿Era un beta o un omega?. Cualquiera de las dos preguntas a pesar de ser simples, se sentían como un rompecabezas en mitad de la noche rodeados por el bosque, así que optó por lo más sensato, convencería al pequeño lobo de ir a su casa, lo calmaría, averiguaría de él lo más posible, si es que lo vienen persiguiendo cazadores, la razón de estar en el pueblo, en fin; entender el porqué estaba tan alterado y después llamar al resto para solucionar las cosas si es que se avecinaba una amenaza mayor.

Estaba cansado de perder gente, así que no perdería a nadie más por un descuido o por su propia estupidez, primero perdió a Stiles por ser tan malditamente cobarde, después perdió la oportunidad de ser padre por su inmadurez y no ser capaz de afrontar sus errores, luego Jordan cuando le dijo que un fugitivo había escapado por el bosque y el no fue en su ayuda y terminó muerto por un disparo, dejando solos a Lydia con su bebé, irónico el cómo un ser que de lleva las almas de los sobrenaturales termina teniendo una muerte tan humana... Quizá si hubiese ido con él eso no habría pasado, no entiende cómo Lydia no lo culpa de aquello, el pequeño Jamie tenía tan solo 3 años de edad y se quedó sin padre... Gracias al cielo Scott se hizo cargo de ellos dos y terminaron enamorándose y formando una familia, sino se sentiría aún más culpable.

Dios, estaba tan cansado de las lamentaciones y los errores, parece que cuando dió el primer paso en falso con Stiles, de ahí en adelante todo se fue a la mierda, incluso su hermana lo había dejado y decidió volver a Sudamérica porque no soportaba estar según sus palabras "con la clase hombre en la que se había convertido"; le dolió tanto una vez que entendió que toda su mierda se le devolvió a la cara, que desde que dejó a su hermana en el aeropuerto, juró ser un mejor hombre para que al menos, su hermana estuviera orgullosa de él como alguna vez lo estuvo en el pasado; por eso no dejaría a este chico ahora solo en medio del bosque, sobre todo cuando parece que se va a morir del miedo.

No soy un maldito Hale, soy Stilinski #STEREKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora