Se congeló en su lugar ante la escena que presenciaba.
"Asta..." Murmuró Noelle antes de expulsar una gran cantidad de sangre de su boca.
Ambos bajaron la vista, en el pecho, la bruja tenía un enorme agujero. Se llevó las manos al sitio llenándose de sangre al instante. Tembló y sus ojos expulsaron lágrimas.
El cenizo avanzó un paso, todavía en shock. No tenía idea de qué había pasado para que la chica terminara de esa manera, de todos modos aunque se acercara, ya era muy tarde, de esa herida sería imposible recuperarse.
Finalmente el cuerpo de la joven se desplomó al suelo en su propio charco de sangre.
Nuevamente, Asta tuvo intenciones de acercarse, pero después del segundo paso, el rededor se prendió fuego y para cuando se dio cuenta ya era imposible acercarse a ella.
Las llamas se reflejaban en su mirada verde, al mismo tiempo que la furia empezaba a crecer en su interior.
"Pobrecilla"
Confundido, giró la mirada encontrándose con una chica que mantenía un gesto lastimero mientras estaba en cuclillas observando las llamas alimentarse de lo que estaba en el suelo.
"Pero bueno... al menos te libraste de ella" La chica se puso de pie y lo miró de costado.
"¿Noelle?" Llamó, aún más confundido. La joven sonrió de vuelta, pero no era la misma sonrisa a la que ya se estaba acostumbrando, no, ésta tenía malicia.
Además, la mirada de la chica era rojiza, entonces no podía ser Noelle a pesar de que conservaba las mismas características físicas, aunque de un aspecto más pálido.
"Eres un diablo, tarde o temprano pasaría" Con un gesto le señaló las manos.
Asta dirigió su vista a donde ella apuntaba y entonces vio aquel listón prenderse fuego y hacerse cenizas en un santiamén. Miró su otra mano y ya no estaba ahí; la marca y el resto de la extremidad ya no existían.
"¿Qué mierda?" Ahora sí estaba más alterado. Empezó a sudar y sus ojos brincaban con cierta desesperación.
Ella dejó salir una risilla y se acercó. "Era lo que querías ¿no es así?"
"¡NO!" Respondió al instante. Jamás sería capaz de algo así.
"Tus acciones no dicen lo mismo" Anunció ella con la misma voz cantarina.
Y por alguna razón, el cenizo volvió a la mano que le quedaba dándose cuenta que ésta ahora eran unas largas garras de color negro y estaban cubiertas de sangre. Definitivamente no era su sangre, entonces él...
"Matarme de esa forma tan cobarde... Eres tan despreciable" Le susurró en el oído.
Empezó a temblar y se dejó caer de rodillas. "Yo no... yo no quiero..." Se supone que se iba a esforzar para que las cosas funcionaran. Él sería incapaz de tocarle un solo cabello.
Ella se sentó a su lado y le palmeó la espalda. "Deja de perder el tiempo, no vas a encajar, mucho menos con ella"
"Cállate" Susurró entre dientes el cenizo. Era Noelle, pero al mismo tiempo no lo era; y esa situación le estaba fundiendo el cerebro. Que usaran su voz y sus facciones para enloquecerlo estaba funcionando de cierta manera. Pero no iba a ceder.
La chica se puso de pie con una sonrisa de satisfacción en el rostro. "Su destino es un error, los lazos que los unen van a terminar matándolos" Declaró convencida.
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Entre espadas y varitas|Astelle
Fiksi PenggemarSecuela de la historia "Hilo del destino".- Acompañen a Asta, Noelle y Liebe en sus aventuras para descubrir por qué el destino ha decidido unirlos.