La Secretaria

Veinticinco

Cinco años después

-Mami, despierta.

-El avión está aterrizando.

Las estridentes voces hizo que abriera los ojos.

Lo primero que vi fue unos rostro delicados, adorables e infantiles.

Los grandes ojos de Alaia y Arya parecían uvas.

Parpadeó y apoyó la barbilla en las manos.

-Mamá, ¿hemos vuelto a Estados Unidos para buscar a papá?

Arya pregunto con brillo en sus ojos.

Me estire y con pereza me senté en el cómodo asiento de clase ejecutiva.

-No tienen padre.

Alaia suspiró como si fuera una adulta.

-Mamá no somos una niñas de tres años. No voy a creer tus tonterías. ¿No tengo padre? Seguro que no salí de una roca, ¿verdad?

No respondí, mientras se recogía el pelo que suelto que me llegaba hasta los hombros.

Las niñas siguiendo murmurando insatisfechas:

-Si no es para buscar a papá, ¿es para conocer a nuestra abuela?

-Si mamá, ¿conoceremos a Tata por fin?

Les sonreí

-Si, Vamos a ver a su abuela

-Porfin!!!

Dijeron ambas chicas con entusiasmo

Mi vida había cambiado en tan solo cinco años, la señora Mónica llegó a depositar la suma de dinero que me dijo en mi cuenta, aunque yo no quería el dinero.

Le dije a Dereck que no sabia que hacer con el dinero, y fue entonces cuando comencé a trabajar con el y me volví su socia.

Me encontraba de camino a firmar la comprar de lo que sería mi último proyecto y que marcaría mi futuro para siempre, ya que Dereck me aseguró que este sería incluso más grande que el de él.

Al llegar a lo que en algún momento pude llamar mi casa.

Toque la puerta y al abrirse pude notar el semblante más hermoso del mundo. Lagrimitas bajaban por su rostro, mi sobrina que ahora tenía diez años me abrazó tan fuerte

-Quien es?

-Hola mamá

Retire mis gafas y no pude evitar llorar al ver a mi madre. Durante los cinco años mantuve comunicación con ella aunque nunca entiendo el motivo de mi decisión, sobre las niñas no le mencioné que las tenia por protección.

-Mya no puede ser!

Se tiro al piso llorando y corrí hacia ella

-si mamá soy yo, tranquila no llores más

Le dio un beso en la frente