Pov's Nathaly
Mi bebé... las palabras aún están siendo procesadas por mi mente, ¿Por qué dije eso?, ¿por qué siento que acabo de perder lo que más he podido amar?, ¿por qué siento que una gran parte de mi corazón acaba de romperse en miles de fragmentos que jamás se repondrán?, ¿por qué me siento tan culpable?.
Mi bebé... creo que fue un impulso, si eso, algo que dije por causa del miedo, pero... Si es así, ¿por qué me siento vacía?.
Una gran opresión se siente en mi pecho, tanto que hasta respirar duele, me remuevo en el suelo, el dolor es insoportable.
-¿Qué... que dijiste?- pregunta Carlos.
No puedo responder esa pregunta, el dolor no me lo permite, y ni yo sé porque lo dije, fue un impulso, cuando sentí que expulse eso de mi cuerpo, lo primero que me vino a la mente es decir eso, mi bebé, pero ahora me siento tan vacía, tan...
-¡Respóndeme maldita sea!- Carlos grita desesperado.
Quiero decirle que yo no lo sé, que no, que no sé porque aquellas palabras han salido de mi boca y por qué duelen tanto, duelen más que lo que viví hace siete años, duelen más que lo que estoy viviendo ahora, este dolor que estoy experimentando es algo diferente, duele más que los dolores que está experimentando mi cuerpo en estos momentos, este dolor es tan diferente que quisiera que acabará conmigo para así no sufrir más, quisiera que acabará conmigo para así no seguir sintiendo está culpa, si, eso siento, culpa, mi conciencia repite una y otra vez que fue mi culpa.
Un fuerte dolor en mi vientre hace que me vuelva un ovillo en el suelo, ignorando el dolor en todo mi cuerpo, lloro, sí, lloro mucho, pues los golpes que ha recibido mi cuerpo cada vez se hacen más fuertes.
Quiero pedirle ayuda al monstruo frente a mí, quiero creer que él me puede ayudar si se lo pidiera, pero, el dolor no deja salir mis palabras, solo las lágrimas.
Siento como de mi vagina sigue saliendo sangre.
-¡Ay!- chillo cuando una gran punzada se manifiesta en mi vientre bajo, que me hace que me remueva como pez fuera del agua.
Una patada, si, una patada hace que me duela más el vientre, Carlos acaba de patear mi abdomen.
Las lágrimas mojan mis mejillas, Mi cuerpo se estremece por el dolor, no aguanto.
Una, dos, tres mi cuerpo recibe patadas en todos lados.
¡Quiero morir!...
-No...- Mi voz se escucha débil, no puedo seguir hablando.
Carlos jala de mis piernas, arrastrando mi cuerpo todo da vueltas.
-No, ¡por favor!- Suplicó, pero es en vano, Carlos saca los pantalones de mi cuerpo, no sé dé dónde saco fuerzas, pero lucho, si, eso hago, pataleo para evitar lo que mi mente se imagina, va a hacerlo, va a hacer lo que no pudo 7 años atrás.
-¡Tú no puedes estar embarazada de otro!-Grita.
-No, por favor no- digo entre lágrimas- Prefiero que me mates, si eso, mátame- suplicó.
No es mentira, prefiero morir a que me v...
-No, no osita, no sería capaz de eso- dice desesperado.
-No me toques por favor Carlos.
-Tendrás a un bebé, si, un bebé que será tuyo y mío.
-¡No!.
Él golpea mi cara y me rindo, si, eso hago rendirme, pues... Ya perdí la batalla, mi cuerpo duele demasiado, el vacío que siento en el pecho me hace sentir que no tengo nada por el cual luchar.
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El Magnate Neoyorquino
RomanceCristián Black. El hombre que toda mujer desea tener, un físico envidiable hay quienes dicen que zeus reencarnó en el cuerpo del Joven magnate neoyorquino. El hombre tiene una actitud arrogante pero que hace que tus bragas se bajen solas, Astuto par...