Lobo Stilinski

XV.- Betas

Stiles se aferró a Isaac con temor, no era tonto y había investigado muchas cosas además de que Deaton le había estado enseñando cosas de druidas y no quería que su cachorro pasara por algo malo.

- No le pasará nada. He hecho esto varias veces, no te preocupes. – le dijo Alan viendo con ternura como el castaño protegía al ruloso.

- Si está en algún momento en peligro lo saco de ahí, no me importa.

Deaton asintió.

Minutos más tarde los lobos se encontraban en la veterinaria llenando una tina de hielos y agua además de otras hierbas que el druida se encargó de tener y poner.

- ¿Entonces tengo que meterme ahí? – preguntó Isaac acuclillado al lado de la tina con sus manos y cabeza sobre ella.

- Si. Tienes que estar casi muerto para poder acceder a tu subconsciente. – le explicó Deaton sin importarle las miradas de los lobos sobre él y más la de Stiles que parecía que le enterraría sus dientes en la garganta.

- ¿Es seguro?

- Nunca nadie ha muerto.

- ¿En tus manos?

Deaton se quedó callado mientras Derek vaciaba la última bolsa de hielos en a tina. Stiles acarició el cabello de Isaac para calmarlo para después ayudarlo con su playera. El rubio se metió dentro de la tina siendo sostenido por los tres lobos.

- ¿Dónde estás Isaac? ¿Qué ves?

- Dentro de una bodega. Boyd, Erika. – sus ojos se movían sin parar – Salí de alguna manera, un letrero. "Banco de Beacon Hills".

Isaac despertó asustado y alterado siendo recibido por los cálidos brazos de Stiles y una toalla sobre su cuerpo.

- ¿Estás bien? – le preguntó Peter mientras acariciaba su cabello.

- Pude verlo. Están en una bodega, pude escapar con la ayuda de la mercenaria.

- Veremos eso después cachorro, ahora tenemos que investigar acerca del Banco Nacional de Beacon Hills. Necesitamos entrar pronto, nuestra manada esta en peligro. – le dijo Peter en un tono serio pero de cariño al mismo tiempo.

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Horas más tarde toda la manada se encontraba reunida en el loft de Derek. Les habían dicho acerca del secuestro de los betas además de la manada alfa que parecían estar en ahí por Derek para que se una a su manada.

- Bien, entonces están en el Banco Nacional de Beacon Hills. Tenemos una ventaja y es que está cerrado por remodelación así que podemos entrar sin preocuparnos de las personas a excepción de los alfas. Lo que podríamos hacer es entrar por un costado, es lo que hicieron en un robo antes de que lo cerraran. – comentó Stiles mientras mostraba los planos del lugar ignorando como su padre levantaba una ceja ante las cosas que tenía.

- ¿Qué tan grueso es el muro? – preguntó Derek cruzando sus brazos sobre su pecho mientras tenía su mirada fija en el plano.

- Lo suficiente como para usar máquina pesada. – miró a su alfa – ¿Podemos atravesarlo solo con nuestra fuerza?

- Podríamos, no creo que haya mucho problema. Pero sería peligroso ir todos juntos o por lo menos entrar.

- No iremos todos. Entraremos solo tú, Derek, Jackson y yo. Los demás nos esperaran fuera a una distancia donde los alfas no los ataquen. – dijo Stiles mientras fruncia el ceño al ver de que estaba hecho el material de la bodega.

- ¿Hay algo malo? – le preguntó Isaac abrazándolo.

- No realmente aunque puede que tengamos unos cuantos problemas con los betas. El material de la bodega esta hecho especialmente para que la luna llena se refleje así que en el momento en que se abra. – miró a los Hale y Jackson – Lo más probables es que tengamos que luchar con ellos hasta que amanezca. Es demasiado peligroso dejarlos salir si están completamente descontrolados. – les explicó Stiles mientras acariciaba el cabello de Isaac.

- Lo haremos. Ellos no lastimarán a nadie, podemos retenerlos hasta el amanecer. – le dijo Jackson con seguridad mientras que los Hale asintieron.

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La manada había logrado entrar al banco, de alguna manera Deucalion los dejó entrar cuando ellos salieron. Stiles estaba seguro de que los vieron al salir pero por el momento no diría nada, había cosas más importantes de las cuales preocuparse.

Jackson abrió la bodega encontrándose con tres pares de ojos dorados mirándolos como si fueran carne recién salida del horno. La luz de la luna iluminaba el lugar y Stiles solo pudo suspirar mientras los Hale y el rubio entraban a al lugar. Él selló la entrada con ceniza para mantenerlos fuera, solo él podría salir de ese lugar pero jamás dejaría a su manada.

- ¿Cora? – preguntó Derek con sorpresa.

- No puedo creerlo. – dijo Peter tratando de retener las lágrimas.

- ¡Salgan de aquí! – gritó la chica de cabello azabache antes de perder el control por completo.

- ¿Quieren compartir con la clase? – les preguntó Jackson mientras esquivaba un golpe de Boyd y luego de Erika.

- Ella es mi hermana. Pensé que había muerto en el incendio. – comentó Derek mientras empujaba a Erika con fuerza.

- Nos podremos a hablar de eso más tarde. ¡Concéntrense! – dijo Stiles mientras siseaba del dolor cuando las garras de Cora lo tocaron.

Unos minutos más tarde los cuatro lobos se encontraban cubiertos de sangre, los Hale y Jackson trataron de proteger un poco a Stiles. Los pequeños cortes habían curado pero tenía una horrible herida en el pecho que no dejaba de sangrar.

- ¡Sti! – gritó Allyson mientras se inclinaba para quitar la ceniza, si seguían así acabarían muertos.

- ¡Allyson! No lo hagas. – le gritó Peter mientras sus ojos brillaban en carmesí.

Antes de que la cazadora pudiera hacer algo, Camden apareció tomándola por atrás y sosteniéndola con fuerza.

- Ustedes concéntrense en ellos, nos encargaremos de lo demás. – les dijo Camden mientras se llevaba a la chica que se resistía.

- Podemos soportar, aún nos quedan unas horas. – les dijo Stiles limpiando la sangre de su mejilla.

Unas horas más tarde los betas junto con Noah entraron preocupados y más al ver como los lobos descontrolados yacían en el suelo inconscientes mientras que los otros cuatro apenas se mantenían en pie. Derek tenía entre sus brazos a un Stiles apenas consciente mientras que Peter estaba recargado sobre la pared tratando de no quedarse dormido y Jackson se encontraba recostado al lado del castaño y el menor de Hale.

Allyson se acercó para romper la barrera y de inmediato los chicos se acercaron a ayudarlos.

Noah, Isaac y Camden se acercaron al Hale menor y el castaño.

- Necesita que cerremos la herida de su pecho, fuera de eso solo necesita descansar. – les dijo Derek mientras dejaba que Camden tomara al menor.

- Tú también necesitas descansar. – le dijo Noah mientras lo ayudaba a levantarse.

- ¿Ellos están bien? – preguntó Danny mientras levantaba a Boyd.

- Si, solo agotados como nosotros. – dijo Peter con una sonrisa.

- Vamos al loft. – les dijo Camden con una sonrisa en el rostro mientras salía de la bodega con su segundo hermanito en sus brazos.

- Vamos a casa.