Capítulo 1- Los cerdos no tienen mañana

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27 de junio...

Es un día tranquilo y normal para Sakuta, y él se encuentra preparándose para salir e ir a la preparatoria Minegahara.

-''Hasta aquí las noticias de esta hora. Que pasen un buen día. A continuación, lo último en deportes''.

-Expresó el noticiero que Kaede estaba viendo por televisión. Sakuta seguía alistándose.


-''...Patea y... ¡Gol! Japón ganó el partido''.

-Continuaba el mismo noticiero.

-''Meow''.
-Maulló Nasuno, el adorado gato de Kaede. Sakuta terminó de prepararse y sedirige hacia la puerta.

Sakuta: Me voy, Kaede.

-Se despidió mientras caminaba.

Kaede: ¡Que te vaya bien, onii-chan!

-Correspondió tranquilamente.

Sakuta sale del edificio donde reside, y frente a las puertas, Sakurajima Mai se encontraba sentada en una banca mirando en su celular. Mai volteo en dirección de Sakuta cuando escucho las puertas principales del edificio abrirse, y de forma relajada apagó y guardo su celular y se levantó.

Mai: ¿Siempre me tendrás esperando tanto?

 -Expresó con una mirada fija y con un tono típico de una reina.

Sakuta: Primero que nada. Buenos días y que linda estás...

-Declaró con un tono algo coqueto, y con una pequeña sonrisa. Mai le sonrió contenta por el elogió.

Sakuta y Mai estaban llegando a la entrada de la preparatoria y, frente a ellos y a unos pocos metros, Neo también estaba llegando. Neo caminaba haciendo unos ligeros y discretos estiramientos de brazos.

Mai: Neo-san...

-Neo que parecía tener la cabeza en otro sitio, logro oír a Mai y rápidamente le dirigió la mirada.

Neo: Mai-san... Y Azusagawa-kun...

-Dijo un tanto seco.

Sakuta: También me da gusto verte.

-Declaró sarcástica y apáticamente. Neo mueve un poco su cuello buscando crujirlo, después hace movimientos de estiramiento de espalda.

Mai: Neo-san, ¿No estás durmiendo otra vez o por qué te ves fatal?

Neo: No es eso. Creo que solo dormí mal...


-''Sengoku-san...''.

-Dijo Kunimi, saludando con la mano extendida, mientras se acercaba.

Neo: Kunimi-san, qué tal...

-Correspondió el saludo sonriendo un poco y también con la mano extendida.


Kunimi: Ah... Hola, Sakuta y... Sakurajima-senpai.

-Declaro un tanto despistado por no haber visto a los mencionados.

Mai: Buenos días...

-Declaró con la mano extendida y un tono algo bajo en su voz.

Sakuta: Con que así de rápido me olvidas...

-Correspondió seco y en tono de broma.

Kunimi: Jajaja... Lo siento.

-''Buenos... días, Sengoku-san... K-Kunimi...''.

-A la conversación, Rio Futaba se unía saludando; también sintiendo un poco de pena por no haber visto a Kunimi.


Neo: Buenos días, Futaba-san.

-Devolvió el saludo con una sonrisa.

Kunimi: Buenos días, Futaba.

-Dijo con una sonrisa un poco más grande que la de Neo. Futaba se sonrojó un poco tras ver detenidamente por unos instantes a Kunimi.

Todos aman a Mai-sanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora