(⚓🔪) 𝗔𝗡𝗖𝗛𝗢𝗥 | "Es más como
si la gravedad se moviera
de repente. Ya no es la tierra
la que te sujeta, ella es quien
lo hace. Te conviertes en lo
que ella necesita que...
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Aquella mañana me sentía tan nerviosa que me negué a comer algo. Hasta que prácticamente Steve me obligó, así que no me quedó más opción. Pero tenía el estómago vuelto un nudo sabiendo a lo que nos estábamos por enfrentar.
En teoría sonaba tan fácil. Viajar al pasado, tomar unas cuantas piedras, volver y usarlas para replicar el chasquido inverso, fin del juego. Sólo que nadie podía saber con exactitud lo que pudiera ocurrir. Peor aún, me aterraba en parte la idea de que saliera bien el plan. Por supuesto que quería ver de nuevo a Bucky y a los demás, sin embargo me preocupaba que este mundo ya no les pareciera el mismo.
Muchas cosas cambiaron en cinco años y los que nos quedamos ya estábamos acostumbrado. ¿Podrían recuperar sus vidas los que volvieran? Bucky jamás se sintió como una pieza funcional de la sociedad cuando estaba aquí, le costaba mucho pensar en tener una vida normal. ¿Y qué tal si ahora todo le resultaba demasiado abrumador para poder soportarlo?
Margaret me choca con su hombro suavemente haciendo que levante la vista. La noto inquieta, abriendo y cerrando los puños mientras íbamos detrás del grupo para subir a la plataforma. No creí que esto la tuviera tan nerviosa como a mí, y entonces recuerdo que estábamos a punto de cambiar nuestras vidas.
Bucky era su hermano y ella la pasó muy mal con su pérdida. Yo no tuve el tiempo para eso, no me di la oportunidad, y mucho menos se me ocurrió tal cosa cuando recién estaba aprendiendo a no matar de hambre a un bebé. Aunque desearía que el echarlo de menos también se hubiera podido evitar, porque en las noches en medio de una cama vacía es cuando más podía sentir su ausencia.
River dormía en mi cama cuando se quedaba conmigo. Eso ayudó un poco, pero no era Bucky y siento que nada iba a poder reemplazarlo. Nadie nunca iba a ser como él, tampoco nadie podría hacerme sentir lo mismo que a su lado.
Así que dejo de lado esas tontas inseguridades y decido enfocarme en esto y en lograr que saliera bien.
—¿Dónde estabas en aquella época? —pregunta Margaret.
—Huyendo. —me encojo de hombros al responder. —Da igual, jamás me interesé por los Vengadores hasta que tomaron fama.
Vaya, eso fue hace mucho tiempo.
Subimos los escalones y nos ubicamos en silencio cuando la voz de Steve al acabar su discurso nos alcanza.
—Esta es la pelea de nuestras vidas. Y vamos a ganar. Haremos lo que sea.
—Los veo en un minuto. —Natasha sonríe y mira alrededor.
Margaret le sujeta la mano igual de sonriente antes de soltarla cuando los cascos se cierran en las cabezas del grupo. Miro al círculo en el medio de la plataforma a medida que se ilumina. Después de eso cierro los ojos y espero.
