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En la salida del jardín, los niños estaban formados en orden y conforme los padres llegaban los niños se iban, SooJin miro a sus alrededores al igual que HongJoong esperando que su padre llegará o al menos sus tíos, que conocía muy poco por regular el esposo de SeongHwa iba a recoger a la niña.
- HongJoong, ya es tarde y me tengo que ir a recoger a mi cachorro! ¿Te quedas con ella?
- amm... Si! - dijo sin verla.
- okey, hasta luego! - exclamó caminado por la acera dejando solo al omega y la niña, HongJoong solo suspiro sonoro cuando sintió un apretón en sus piernas sorprendiendolo.
- mi papi... - dijo mientras sollozaba.
- tranquila SooJin... - exclamó respondiendo al abrazo, acariciando su cabellito negro. - Tu papá debe estar ocupado al igual que tus tíos!, - se puso de cuclillas sonriendo. - Porque no vamos por un helado y luego te llevo a la empresa de tu papá, que dices?
Se sorbió su naricita dudando sobre lo que dijo su maestro pero al final asintio con una sonrisa, HongJoong tomo su bolso, extendió su mano ella la tomo gustosamente y comenzaron a caminar por la acera hacia la heladería más cercana.
En la heladería el ojiesmeralda abrió la puerta haciendo resonar la campanilla del local, ambos se acercaron al mostrador aún tomados de la mano y con una sonrisa.
- ¿Que van a ordenar?
- amm... Uno de vainilla! - dijo sonriente, la chica anotó en su libreta.
- y su hija? - pregunto la beta.
- ahh! No! - fue interrumpido.
- ¡Chocolate! - dijo la pequeña ojinuez sonrió ampliamente dando saltitos, el omega solo se sonrojó ligeramente sonriendo.
- okey pequeña! - sonrió diciendo esto, HongJoong y SooJin caminaron hacia una mesa cercana, el rubio tapándose con su mano su sonrojó la niña ladeó su cabecita al ver a qué maestro así.
- ¿Que le sucede maestro?
- nada SooJin! - desvío la mirada.
- pero...
- ¡Aquí sus helados! - dejo las copas de helado enfrente de cada uno.
- gracias! - la beta hizo reverencia alejándose de la mesa, los ojitos nueces de SooJin se iluminaron al ver el helado enfrente de ella, tomo la cuchara con un poco de helado.
- ¡Esta delicioso!
- Que bueno que te gustó! - dijo sonriendole. - ¡Ouh! - tomo una servilleta y limpio alrededor de la boquita de la pequeña ojinuez. - Listo! - sonrió levemente mirando a SooJin.
[🍯✨]
Minutos antes en la empresa el alfa se estaba preparando para ir por su hija y y dejarla en casa de su hermano, pero un omega irrumpió en la oficina del pelinegro provocando que su seño se frunciera.
