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Cuatro meses después de los sucesos entre el omega y su madre, los padres de HongJoong se regresaron a su ciudad natal dejando a su hijo solo, el alfa le había comentado a su pareja el porque no se iba a vivir con ellos, después de una larga semana el ojiesmeralda tomo la decisión de irse a vivir con San y SooJin.
La pareja estaba llevando cajas de un apartamento a otro, la pequeña niña también ayudaba llevando cosas que le daba su padre claro que no le costará de llevar a la niña. Después de dos horas de llevar las últimas cajas al apartamento del alfa, HongJoong dio un último vistazo a su apartamento donde vivió 4 años y paso bueno y malos momento, suspiro sonoro cerrando la puerta para dirigirse al apartamento de su alfa y vivir ahora como una familia, bueno eso decía SooJin.
Por la tarde el omega había terminado de organizar sus cosas en el armario salió de ahí para ver qué hacían sus dos amores, en la sala de estar la pequeña ojinuez estaba jugando con sus muñecas en la alfombra sonrió tiernamente al verla, mientras San trabaja con una pila de papeleo que debía entregar para mañana en una junta, HongJoong frunció su labio y su entrecejo mirándolo podía sentir que su alfa estaba estresado y agotado de tanto trabajar, sus ojos se agrandaron sonrió acercándose al pelinegro por detrás, el rubio tomando sus hombros comenzando a darle un masaje provocando que San cierre los ojos soltando el bolígrafo y se relaje.
- le quita los lentes poniéndolos en la mesa. - estás muy estresado, cariño!
- tu porque crees...
- el trabajo te absorbe, San! - dejo el masaje preocupándose por el ojinuez sentandose en la silla de a lado. - ¡Deberias descansar, trabajas lunes a viernes y hasta a veces vas los sábados!
- lo sé... Pero quién va a dirigir la empresa? - dijo tomando sus lentes para ponérselo.
- se que el único que la puede dirigir eres tú!tomo las manos del alfa mirándolo. - ¡Pero ahora que hiciste todo esto por mi, yo quiero hacer algo por ti!
- a veces pienso que no te merezco...
- Amor! - exclamó bajando la cabeza escondiendo su sonrojó, San tomo la barbilla de su menor alzando su cabeza para que viese a los ojos con esos ojitos verde esmeralda que tanto amaba ver el pelinegro el alfa acercó su rostro al contrario peligrosamente quedando a unos pocos centímetros de besarse.
- eres lindo cuando te sonrojas! ¿Lo sabías?
- No... Pero eres el primero en decírmelo! - dijo riendo levemente desviando la mirada.
- pues es un honor ser el primero! - dijo, para entrelazar su mano con la mano del omega y besar los labios rosados de su pareja, al separarse HongJoong se levantó de la silla para dirigirse a la cocina.
- voy hacer la comida... - exclamó con una sonrisa caminando hacia la cocina.
- Y dime va haber postre? - dijo mirando pícaro su trasero esa cintura delineada que no se comparaba con nadie más y esas caderas!,el rubio encarnó sus cejas deteniéndose para darse media vuelta para fijar su vista en el.
